La Santa Sede ha hecho público este martes que el Papa Francisco acudió al monasterio Mater Ecclesiae el pasado 21 de diciembre a visitar al Papa emérito Benedicto XVI para felicitarle la Navidad.
El encuentro duró una media hora y se celebró como en otras ocasiones en un ambiente de gran cordialidad. Según confesó el propio Francisco en el vuelo que le llevaba de Armenia a Roma en 2016, las visitas no son algo infrecuentes. “Benedicto está en el monasterio rezando: yo he ido a encontrarlo muchas veces o al teléfono”, aseguró el Papa, que dijo que con sus oraciones, el pontífice emérito “me custodia las espaldas”.
Hace poco más de un mes, el 18 de noviembre, el Papa Francisco rindió homenaje a Benedicto XVI con motivo del Premio Ratzinger, recordando que "su oración y su presencia discreta y alentadora nos acompañan en nuestro camino común". "Su trabajo y su magisterio – subrayó Francisco- siguen siendo un legado vivo y precioso para la Iglesia y para nuestro servicio". Y agregó: "Joseph Ratzinger sigue siendo un maestro y un interlocutor amistoso para todos aquellos que ejercen el don de la razón para responder a la vocación humana de la búsqueda de la verdad".
Con esta visita de Francisco se vuelven acallar una vez más los bulos sobre la salud de Benedicto XVI y las informaciones que hablaban de su estado de salud y del bulo que incluso afirmaba que no podía ya ni hablar o que había muerto.