Desde que el caso sobrepasó la frontera de Reino Unido, el Papa Francisco ha estado especialmente pendiente de caso y ha ofrecido su ayuda a la familia. De hecho, su implicación así como la de otros mandatarios internacionales consiguió que la Justicia volviera a revisar la posibilidad de que Charlie recibiera un tratamiento.
Este lunes, tras conocer la decisión de los padres el Papa ha querido mandar un mensaje de consuelo a Charlie y sus padres “en este tiempo de sufrimiento”.
El director de la Sala de Prensa de la Santa Sede, Greg Burke, ha afirmado en un comunicado que “el Papa Francisco está rezando por Charlie y sus padres, y se siente especialmente cercano a ellos en este tiempo de inmenso sufrimiento”.
"El Santo Padre nos pide que nos unamos en oración para que puedan encontrar el consuelo y el amor de Dios", agregó.
Por su parte, un portavoz de la Conferencia de Obispos de Inglaterra y Gales expresó la cercanía de la Iglesia a sus padres, así como su compasión "por ellos y por su hijo".
"Es por Charlie, sus padres y su familia que todos nosotros rezamos, esperando que puedan, como una familia, recibir el apoyo y el espacio para encontrar paz en los días venideros".
"Su despedida a su pequeño y precioso bebé toca los corazones de todos los que, como el Papa Francisco, han seguido su triste y compleja historia. La vida de Charlie será cariñosamente apreciada hasta su fin natural", señalaron.
Cuando la Justicia todavía debía decidir sobre Charlie, el Papa Francisco publicó un mensaje en Twitter, que consiguió gran repercusión en el que afirmaba que “defender la vida humana, sobre todo cuando está herida por la enfermedad, es un compromiso de amor que Dios pide a todos los hombres”.
Además, el Hospital Niño Jesús, hospital pediátrico de Roma que pertenece a la Santa Sede ofreció trasladar y acoger al bebé enfermo.