Nicolás Maduro visitó este lunes por la tarde al Papa Francisco y se reunió con él de manera privada pues el encuentro no estaba previsto en la agenda de la Santa Sede. 

La oficina de prensa de la Santa Sede informó que este encuentro se enmarca en la crítica situación que se da en Venezuela, país que vive en la actualidad un crisis política, social y económica sin precedentes en su historia reciente.

Según recoge Zenit, el Papa “que tiene en el corazón el bien de todos los venezolanos” ha deseado continuar ofreciendo su contribución “a favor de la institucionalidad del país y de cada paso que contribuya las cuestiones abiertas y crear mayor confianza entre las partes”.


Asimismo ha invitado a “emprender con valentía el camino del diálogo sincero y constructivo” para “aliviar los sufrimientos de la gente, de los pobres en
En declaraciones después de la audiencia privada el presidente venezolano indicó que el encuentro “duró 30 minutos, venimos de la gira relámpago de los países petroleros Opep y no Opep”.

Maduro explicó que “estamos llegando de Qatar, teníamos un toque técnico aquí en Roma, como siempre hacemos, y surgió esta posibilidad, se le hizo esta solicitud al Papa Francisco y en tiempo récord se cuadró esta reunión privada”. Definió la reunión con el Santo Padre como “extraordinaria, profunda, muy espiritual y muy humana”.




“Le di las gracias por todos su apoyo en Venezuela –señaló Maduro– para que por fin definitivamente se instaure una mesa de diálogo entre los diversos factores de la oposición y el Gobierno legítimo bolivariano que yo presido”. Conversaron también de la situación de América Latina y del mundo.

“Espero que se ponga el tema económico de la recuperación de Venezuela como punto central. Espero que se imponga el respeto a la Constitución y se abandone el camino del golpismo”, declaró Maduro.

En su cuenta Twitter el mandatario escribió: “Desde Roma les envió el saludo y las bendiciones del Papa Francisco a nuestro Pueblo… excelente reunión privada con profunda espiritualidad”, acompañando de una foto de su encuentro del 2013 con el Santo Padre.


Mientras tanto ha llegado a Caracas el nuncio apostólico en Argentina, Mons. Emil Paul Tscherrig, como enviado especial del Vaticano, quien está contactando a los diversos sectores políticos para reiterar la disposición de facilitar el diálogo.

El gesto de Maduro abre una posibilidad de salida a la crisis, en la que el Vaticano quiere colaborar defendiendo la institucionalidad del país. Los diálogos se anuncian en momentos de alta tensión política, tras la decisión del poder electoral de suspender el proceso que permitiría un referendo revocatorio del mandato de Maduro, promovido por la oposición que recolectó más de un millón de firmas.

Esta ha sido la segunda vez que el presidente de Venezuela se reúne con el Pontífice. La primera vez fue el 17 de junio de 2013. En dicha ocasión en el encuentro “se detuvieron sobre la situación social y política del país, después del reciente fallecimiento del presidente Hugo Chávez Frías, así como sobre algunos problemas de actualidad, como la pobreza y la lucha contra la delincuencia y el tráfico de drogas”.

En el mes de junio de 2015, el Santo Padre y el mandatario venezolano tenían previsto otro encuentro en el Vaticano que fue anulado días antes porque Maduro suspendió su viaje a Roma, aduciendo una fuerte otitis.