El pasado viernes, la Santa Sede y el Patriarcado de Moscú difundieron un comunicado conjunto en el que anunciaron que el encuentro tendrá lugar en Cuba.
El Papa Francisco partirá de Roma el viernes 12 a las 7:45 horas y llegará al aeropuerto José Martí de La Habana (Cuba), a las 14:00 horas.
Quince minutos después se realizará el encuentro privado entre ambos líderes religiosos. El Patriarca ruso viaja a Cuba en el marco de una gira por América, en la que visita también Brasil, Chile y Paraguay.
Es una reunión que Moscú ha valorado positivamente y en la que se tratarán asuntos sobre la persecución de las comunidades cristianas en Oriente Medio, según ha adelantado el metropolita Hilarión, presidente del departamento para las relaciones exteriores del Patriarcado de Moscú.
Tras el encuentro privado, que durará dos horas, a las 16:15 horas tendrá lugar el intercambio de regalos y diez minutos después se firmará una declaración conjunta. Luego el Papa Francisco y el Patriarca Kirill pronunciarán un discurso cada uno.
A las 17:00 horas será la presentación de delegaciones y media hora después el Santo Padre partirá hacia México, a donde llegará a las 19:30 horas.
Tanto la Santa Sede como el Patriarcado de Moscú han invitado a todos los cristianos a rezar con fervor por la bendición del encuentro. Las dos Iglesias “desean que sea una señal de esperanza para todos los hombres de buena voluntad”.
El diálogo ecuménico con las Iglesias Ortodoxas de tradición bizantina, siriaca y eslava comenzó oficialmente en 1980, aunque los primeros pasos importantes en tiempos modernos se dieron ya durante el Concilio Vaticano II, con la cancelación de las excomuniones recíprocas del año 1054.
La cumbre de La Habana, que lleva mucho tiempo preparándose, será la primera de este tipo y marcará una etapa importante en las relaciones entre la Iglesia Católica y la Ortodoxa Rusa.