Tras la intervención del secretario general, Lorenzo Baldisseri, en la que explicó de nuevo algunos aspectos de la metodología del Sínodo, sobre todo para ayudar a los padres que participan por primera vez.
Lombardi explicó también la intervención por sorpresa del Papa aclarando qué documentos son los oficiales del Sínodo (lo detallamos aquí).
El padre Lombardi informó que en las intervenciones del primer día incluyeron los siguientes temas:
- la revolución cultural de la época que estamos viviendo, en la que se coloca nuestra reflexión, donde la Iglesia acompaña;
- el lenguaje apropiado por parte de la Iglesia para describir situaciones y en particular, para evitar impresiones de juicios negativos en situaciones y personas;
- la importancia del crecimiento de la vida cristiana de las familias y las parejas y sobre el acompañamiento necesario para ayudar en este crecimiento;
- el testimonio y misión que la familia debe desarrollar en este tiempo;
- la Iglesia vista como gran comunidad que sostiene;
- la importancia de los ancianos en la transmisión de la fe;
- el posible rol o espacio a ocupar por las conferencias episcopales en el afrontar situaciones más específicas;
- la violencia tanto en las familias y la sociedad y en particular sobre las mujeres, trabajo infantil, pobreza extrema y situaciones de conflicto.
Los africanos, observó el padre Lombardi, hablaron también de temas más específicos de su continente como la poligamia.
Por su parte, el portavoz para la lengua española, el padre Manuel Dorantes, subrayó que algunos padres latinoamericanos denunciaron la ideología de género, “que influye en las legislaciones y organizaciones internacionales”.
Participaron en la sesión informativa ante la prensa Claudio Maria Celli, presidente del Pontificio Consejo para las Comunicaciones Sociales y Paul-André Durocher, arzobispo de Gatineau.
Celli, respondiendo a la pregunta de un periodista, aseguró que la actitud del Sínodo sobre la comunión a los divorciados y vueltos a casar es abierta y pastoral. "Aún no está todo claro porque si no ¿qué hacemos aquí debatiendo?", aclaró. Por su parte, monseñor Durocher recordó que la doctrina es para todo el mundo y no para unos pocos elegidos, y los padres sinodales están todos de acuerdo en que enseñar esta doctrina es algo bueno.
Celli matizó también que el Sínodo tiene una visión amplia, “se respira un ambiente de Iglesia universal y no de gueto” y “se respira una Iglesia guiada por el Espíritu Santo que sopla donde quiere y sorprende continuamente”.
En este vídeo, el padre Santiago Martín explica la diferencia entre un Sínodo y un Concilio, y algunos de los riesgos que se pueden dar