El Papa Francisco ha recibido este domingo, 7 de junio, a la presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, en un encuentro que ha durado una hora y cuarenta y cinco minutos. La audiencia privada ha tenido lugar en el Estudio del Papa junto al Aula Pablo VI.

La presidenta “ha querido manifestar una vez más su afecto y la cercanía del pueblo argentino al Papa y pedir su bendición para todos sus compatriotas”, tal y como explica la nota de la Oficina de Prensa del Vaticano.

Primero llegó el Santo Padre a pie, caminando desde Santa Marta y al pasar delante de los periodistas, fotógrafos y cámaras y les dijo "Hoy es el día del periodista, felicitaciones".

Algunos minutos después llegó la presidenta en coche y el Papa ya la esperaba dentro.

Antes de pasar a la sala donde estuvieron reunidos en privado, posaron unos instantes ante los fotógrafos, mientras Cristina decía al Papa “la manito, la manito” y así se dieron la mano frente a las cámaras.



Después de la larga reunión, pasaron a otra sala donde tuvo lugar el tradicional intercambio de regalos junto con la numerosa delegación que acompañaba a la mandataria argentina.

Kirchner entregó al Papa seis regalos:

-Un gran cuadro de un retrato del beato Romero, realizado por un famoso pintor argentino, Eugenio Cuttica, con una técnica muy particular.

-En segundo lugar un libro del patrimonio arquitectónico argentino hecho por el Bicentenario de Argentina.

- Otro libro de Alberto Methol-Ferré, llamado ‘Los Estados Continentales y el Mercosur’.

- También le entregó una edición del famoso poema nacional Martín Fierro, citado en alguna ocasión por el Santo Padre.

- Asimismo regaló también dos bajorrelieves, uno de la Virgen de Luján, que indicó se lo habían regalado a ella, y otro de un retrato del Santo Padre. Ambos hechos por ciegos, en los que se podía ver la escritura en braille.

- El último de los regales fue una cesta con productos alimenticios regionales típicos argentinos.

Por su parte, el Santo Padre regaló una reproducción de un icono ruso del siglo XI, que representa a la Virgen de la Ternura. Tras el encuentro, ella ha comentado “estoy muy feliz” y afirmó sentirse “iluminada por dentro”.

Al finalizar el encuentro, el Pontífice salió de nuevo a pie y al pasar delante de los periodistas que estaban fuera les dijo: "Recen por mí, y si alguno no puede rezar porque no cree, tírenme buena onda”.

Este es el quinto encuentro entre el papa Francisco y la presidenta argentina, cuatro fueron en el Vaticano y uno en Brasil cuando el Santo Padre viajó allí para la Jornada Mundial de la Juventud.

La presencia en Roma de Kirchner se debe a la participación en la Conferencia de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), con sede en la capital italiana, que se celebra del 6 al 13 de junio.