El director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, el padre Ferderico Lombardi, ha negado este lunes 27 de enero, desde Toledo (España) que "el extraordinario interés" por el Papa Francisco sea el resultado de una nueva estrategia de comunicación iniciada desde el Vaticano, tal y como, ha afirmado, se han preguntado "algunas personas que realizan actividades u organizaciones de relaciones públicas".

Así se ha pronunciado el portavoz del Vaticano en el transcurso de la conferencia que ha impartido en el Instituto Teológico de San Ildefonso de Toledo bajo el título ´Reflexiones y experiencias sobre la comunicación de tres Papas´, a la que han asistido el secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española, monseñor José María Gil Tamayo, y el arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez.

"Les puedo asegurar que en comparación con el Pontificado anterior no se ha iniciado en el Vaticano una nueva estrategia de comunicación en el sentido de un estudio previo de las actividades, discursos o gestos del Papa con el fin de llamar la atención de los presentes y tener éxito. No hay nueva estrategia planificada desde un despacho", ha manifestado con rotundidad Lombardi.

No obstante, ha indicado que "por supuesto" los colaboradores del Papa tratan de hacer "bien" su trabajo en el campo de la comunicación, utilizando las herramientas adecuadas para difundir las imágenes y las palabras, con el fin de facilitar la adecuada comprensión e interpretación de las mismas.

A su juicio, el interés y la atracción que ha despertado el Papa Francisco se debe, entre otras muchas razones, a que "actúa con un enfoque pastoral y un lenguaje muy concreto, que es fácilmente entendible y acogido por la gente".

Asimismo, Lombardi ha apuntado que la forma en la que Francisco ha establecido su relación con los periodistas en el primer viaje internacional en Brasil, "con la brillante idea del largo y amistoso saludo personal a todos durante el viaje de ida y con la interminable entrevista de una hora y veinte minutos en el viaje de regreso", han tenido un impacto similar al que tuvo en su momento el nuevo estilo del Papa Juan Pablo II.


Durante su alocución, el portavoz del Vaticano ha confesado que en los primeros días del nuevo Pontificado, cuando se dio cuenta de que el nuevo Papa sabía y hablaba pocos idiomas y que se sentía a gusto sólo con el español y el italiano, le entró "una fuerte preocupación". "Sus predecesores eran grandes políglotas", ha advertido.

No obstante, ha dicho Lombardi, "pronto se dio cuenta de que el Papa Francisco no tenía intención de multiplicar los saludos en diferentes idiomas ni en las reuniones internacionales, como la primera audiencia con los periodistas después de la elección".

"¿Cómo habrían reaccionado los fieles en particular en un mundo donde muchas personas piensan que el inglés es el idioma dominante, una necesidad en el mundo internacional? ¿Qué habrían dicho y pensado los americanos, los ingleses o los asiáticos?", se ha preguntado.

Lo que realmente ocurrió "ya lo sabemos": "El papa habla sólo el italiano, el español y habló en portugués en algunos momentos del viaje a Brasil, y las multitudes vienen a Roma más que antes, y el interés por el Papa es muy alto en todas partes del mundo", momento que ha aprovechado para recordar que la revista Time eligió al Papa que no habla inglés como el hombre del año.

Lo que se concluye de todo esto, ha proseguido, es que la eficacia de la comunicación global puede ser ayudada, pero no depende de la cantidad de idiomas que una persona conoce, incluso, ha manifestado, "si el Papa no habla inglés puede hacer llegar mensajes importantísimos al mundo entero".

Así, tras destacar que el Papa Francisco tiene "un extraordinario carisma de comunicación que compensa ampliamente el conocimiento limitado de idiomas", ha subrayado que hay un "extraordinario interés" por las homilías del actual Papa en la matutina misa diaria en Santa Marta que en la radio vaticana se traducen en 40 idiomas.