El famoso exorcista de la diócesis de Roma (Italia), Padre Gabriele Amorth, analizó la oración que el Papa Francisco realizó sobre un mexicano poseso de 43 años en la Plaza de San Pedro el pasado domingo 19 de mayo, Solemnidad de Pentecostés.
En entrevista concedida a ACI Prensa el 22 de mayo, el sacerdote señaló que ese día "el Papa de buena voluntad se acercó y le hizo un exorcismo bajo forma de oración de liberación, no como el exorcismo clásico que se hace con el libro".
El mexicano, dijo Amorth, "es realmente un alma de Dios de la cual el Señor se sirve para reprochar a México por la legalización del aborto".
El Padre Amorth comentó además que él mismo realizó un exorcismo de más de una hora a este hombre mexicano antes que el Santo Padre rezara por él en la Plaza de San Pedro.
"Estoy informado bien sobre aquel joven. Un joven bueno, de oro, demuestra menos años de los que parece, tiene 43 años, casado, con hijos", agregó.
"Esta misma oración, la vi hacer por tres veces también a Juan Pablo II. El Papa Francisco impuso sus manos, oró y basta. Es suficiente", afirmó el Padre Amorth.
El famoso exorcista de la diócesis de Roma tiene 88 años y ha realizado más de 70 mil exorcismos durante los últimos 27 años. El número es alto porque realizar un exorcismo puede requerir múltiples sesiones y cada vez que se realiza se cuenta por separado.
Luego de la entrevista con ACI Prensa, el sacerdote hizo una serie de comentarios en la Fundación Lepanto de Roma, una organización católica que lo invitó para comentar sus dos últimos libros: "El último exorcista, mi batalla contra Satanás" y "El signo del exorcista, mis últimas batallas contra Satanás".
"Han notado que este Papa en sus primeros diez discursos breves, ha nombrado siempre a ‘su excelencia’ el diablo", dijo el exorcista en medio del ruido de la lluvia y los truenos que caían fuera del recinto.
"¿Qué es lo que hizo el domingo pasado? Como es normal en él, con su simplicidad, al terminar la Misa fue a pie a saludar a los enfermos, y un sacerdote mexicano le señaló la presencia de un joven poseído del demonio".
El Padre Amorth dijo además que "en esta oración de liberación que ha hecho a este joven en la plaza, el Papa no se escondió… Jesús hacía los exorcismos por la calle, en las casas, donde fuera".
"Yo he debido cambiar 23 sitios en Roma para poder hacer exorcismos. Quisiera que todos asistiesen a los exorcismos… he visto muchísimos sacerdotes que después de ver uno ya no tenían dudas sobre la existencia de Satanás… hace falta verlo".
El exorcista aseguró que la gente no cree en la existencia del demonio ahora y denunció que existen pocos sacerdotes que realizan la labor que él desempeña. "No hay casi exorcistas y esto ocurre por culpa de los obispos. Cuando un obispo no provee comete pecado mortal", indicó.