"¿Cómo puede una Iglesia que está permanentemente en reuniones ser una iglesia permanentemente en misión?"
Esa es una de las preguntas incómodas que hace en la revista ecuménica First Things el ensayista y teólogo norteamericano George Weigel .
Teólogo y profesor, George Weigel se hizo popular en 1999 con su biografía sobre Juan Pablo II, Testigo de la Esperanza. Es uno de los impulsores de la revista ecuménica First Things y de iniciativas conjuntas con evangélicos provida y profamilia como Catholics and Evangelicals Together. Gran defensor del Concilio Vaticano II y la libertad religiosa, defiende un debate fuerte de ideas y una evangelización que sea cortés pero valiente.
Ha entrevistado o dialogado en profundidad con los tres últimos Papas: Francisco, Benedicto XVI y Juan Pablo II. Eso le da perspectiva. También conoce bien los vicios y torpezas de las estructuras vaticanas (así como sus posibilidades de hacerlo mejor).
Su artículo en First Things se titula Un instrumento trabajoso y vacuo, y se refiere sobre todo al 'documento de trabajo' (el Instrumentum Laboris, o IL para abreviar) que se usará en octubre de 2023 en los grupos reunidos en el Sínodo de la Sinodalidad en el Vaticano.
Pero podría entenderse que considera "trabajoso y vacuo" no solo el documento, sino toda la idea de hacer "sínodos de sinodalidad", al menos tal como se formulan.
Weigel querría, como dice que quiere el Papa Francisco, una iglesia "permanentemente en misión", de "discípulos misioneros", que anuncien el Reino de Dios en un mundo que sufre por su sometimiento a falsos dioses. Pero en el texto del IL no ve casi nada de eso.
Describe el IL como "vacuo, una gran cantidad de 'sociologés' coagulado, de moda, con una fina capa de lenguaje e imágenes cristianas".
Detecta al menos 5 campos en los que el IL muestra su vacuidad:
1) "El IL es cristológicamente vacuo"
Tiene algunas menciones rápidas a Jesús, pero por lo demás el texto podría ser el de una ONG buscando más socios y donantes. A veces se menciona la Constitución Dogmática del Vaticano II, pero ese texto empezaba declarando que "Jesucristo es la luz de las naciones" y en el IL no hay nada así. Todo es "eclesiocentrismo, autorreferencialidad, que fue deplorada por el Papa Francisco".
De izquierda a derecha, el cardenal Grech, el cardenal Hollerich y el sacerdote Giacomo Costa, consultor de la secretaría del sínodo, presentando el Instrumentum Laboris en el Vaticano en junio de 2023.
2) "El IL es pneumatológicamente vacuo"
"Pneuma" es el Espíritu Santo en griego. El IL repite que el Espíritu Santo hablará en el sínodo. "Pero el IL no dice nada de cómo la Iglesia diferencia entre la voz auténtica del Espíritu Santo y el espíritu de esta era, que San Pablo decía a los romanos que tenían que evitar" (en Romanos 12,2).
El IL habla mucho de "discernimiento", pero, advierte Weigel, "no explica por qué el discernimiento que ha tenido lugar en los dos últimos años años del proceso sinodal sigue la agenda del proyecto evangélicamente moribundo 'católico light', cuyas ruinas chamuscadas son evidentes en Alemania".
3) "El IL es eclesiológicamente vacuo"
Una y otra vez el IL dice que la Iglesia ha de dedicarse a "escuchar", pero no dice nada o casi nada sobre el mandato que le dio Jesucristo de enseñar: "Id y haced discípulos y enseñadles a guardar lo que os he encomendado" (Mateo 28,19-20). Los pastores según el IL no parecen tener nada que enseñar y están como "facilitadores" de diálogos como "prioridad en todos los niveles de la vida eclesial".
Así, Weigel se pregunta: "¿cómo puede una Iglesia permanentemente en reuniones ser una Iglesia permanentemente en misión? ¿Y cómo puede un proceso en el que, como mucho, participan el 1 por ciento, ser considerado expresión del sensus fidelium, el sentido de los fieles?"
4) "El IL carece lamentablemente de teología moral"
El IL no menciona ni a las Bienaventuranzas, ni a los 10 Mandamientos, ni ninguna otra orientación moral de la Iglesia. Más bien al contrario, cuando insiste en "escuchar" parece que anima a todos los que ponen en cuestión las verdades morales de la Iglesia, aunque se hayan enseñado de forma firme, con base en la razón y la revelación.
5) "El IL es metodológicamente pueril"
"La 'Asamblea Sinodal' en octubre de 2023 tendrá poca o ninguna libertad para definir su propósito o agenda. Ya los han definido una serie de 'hojas de ruta' anexadas al IL, que plantean preguntas que los miembros de la Asamblea deben abordar en las reuniones plenarias y los grupos de trabajo por idiomas", apunta Weigel.
"La sensación general que da la 'hoja de ruta' del IL es que la Asamblea Sinodal se parecerá a una clase de guardería: 'coloread sin salir de las líneas, niños y niñas'", protesta el analista.
"Hay muchas cosas en la Iglesia que necesitan renovación y reforma. El "instrumento de trabajo" del Sínodo de la Sinodalidad no ayuda a que eso se haga. Ni refleja la enseñanza cristocéntrica y el Espíritu del Vaticano II", concluye Weigel.
El Instrumentum Laboris en español se puede leer entero aquí.