La plaza de San Pedro luce más bonita que nunca. Y es que ya se ha iluminado el árbol de Navidad del Vaticano que Ucrania ha regalado al Papa. Para la ceremonia, una delegación de este país se desplazó hasta Roma.

Participaron obispos ucranianos, como el Arzobispo Mayor de la Iglesia Greco-Católica Ucraniana, Svioatoslav Schevchuck, del que dependen unos siete millones y medio de personas en todo el mundo.

También estaban el arzobispo de Lviv, Mieczysław Mokrzycki; el Viceprimer ministro Kolesnikov Borys y el arzobispo ortodoxo de Poltava e Myrhorod.

El árbol procede de la región ucraniana de Zakarpattya, mide 30,5 metros, pesa 4,9 toneladas y está adornado con 2.500 esferas de color oro y plata y figuras de ángeles y animales.