El Papa Benedicto XVI ha dedicado este domingo unas palabras a las personas secuestradas por actos de piratería, para pedir que sean tratados con "respeto y humanidad", en una intervención pronunciada al término de la Oración del Ángelus, con motivo de la celebración del Domingo del Mar, la Jornada del apostolado del ambiente marítimo.
"Aseguro mi oración también para la gente de mar que lamentablemente ha sido secuestrada por actos de piratería. Espero que sean tratados con respeto y humanidad, y rezo también por sus familiares, para que sean fuertes en la fe y no pierdan la esperanza de reunirse pronto con sus seres queridos", ha señalado.
Desde su residencia de verano de Castel Gandolfo, Benedicto XVI ha abordado en la reflexión previa a la Oración del Ángelus que "el respeto de la libertad es propio del amor".
Apoyándose en el Evangelio de este domingo, la parábola del sembrador, ha explicado que "las parábolas, de hecho, por su naturaleza requieren un esfuerzo de interpretación, interpelan a la inteligencia pero también a la libertad".
En este sentido, ha señalado que "en el fondo, la verdadera ´Parábola´ de Dios es el mismo Jesús, su Persona que, en el signo de la Humanidad, esconde y al mismo tiempo revela la divinidad".
"De esta manera Dios no nos obliga a creer en El, sino que nos atrae a Sí con la verdad y la bondad de su Hijo encarnado: el amor, de hecho, respeta siempre la libertad", ha señalado el Santo Padre.