Las cuatro ordenaciones sacerdotales realizadas el pasado fin de semana en la localidad alemana de Zaitzkofen, de manos de uno de los obispos de la Fraternidad de San Pío X, separada de la comunión con Roma, son ilegítimas, aclaró hoy el portavoz de la Santa Sede, Federico Lombardi.

El director de la Sala de Prensa respondía así a las preguntas de varios periodistas sobre estas ordenaciones sacerdotales, realizadas por el obispo Bernard Tissier de Mallerais, uno de los cuatro obispos de la Fraternidad San Pío X.

Ante esta situación, afirmó Lombardi, “no queda más que afirmar lo ya declarado en situaciones análogas del pasado, es decir reenviar a lo afirmado por el Santo Padre en su Carta a los Obispos de la Iglesia Católica del 10 de marzo de 2009”.

“Mientras que la Fraternidad (San Pío X) no tenga una posición canónica en la Iglesia, tampoco sus ministros ejercitan ministerios legítimos en la Iglesia”, subrayó Lombardi.

“Hasta que las cuestiones que conciernen a la doctrina no se aclaren, la Fraternidad no tiene ningún estado canónico en la Iglesia”, y sus ministros “no ejercitan de modo legítimo ningún ministerio en la Iglesia”.

“Las ordenaciones son, por tanto, consideradas ilegítimas”, concluyó. En lo que va de año, la FSSP ha realizado 20 ordenaciones sacerdotales.