El sacerdote riojano Celso Morga Iruzubieta, que hasta ahora era subsecretario de la Congregación para el Clero, fue nombrado ayer por Benedicto XVI arzobispo y secretario de este dicasterio que supervisa al clero diocesano de todo el mundo, en sustitución del cardenal Mauro Piacenza, que a su vez, fue elevado a prefecto de la congregación. Se convierte así en el «número dos» de esta congregación.

La diócesis de Calahorra y La Calzada ha transmitido las primeras palabras de alegría de Morga al conocer este nombramiento: y su deseo de ofrecer, desde su nueva responsabilidad, su «oración, ayuda fraterna, apoyo en sus necesidades y estimulo para la nueva evangelización» que reclama Benedicto XVI. Morga fue ordenado sacerdote en Logroño en1972. Es doctor en Derecho Canónico por la Universidad de Navarra, trabaja desde 1987 en la Congregación para el Clero y era subsecretario desde 2009.

Benedicto XVI repartió ayer cargos y responsabilidades en los organismos de la Curia entre los nuevos cardenales, creados en el reciente consistorio de noviembre.

A la Congregación para la Doctrina de la Fe asignó a Angelo Amato, prefecto de la Congregación de las Causas de los Santos, y a Kurt Koch, presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos.

A la Congregación para los Obispos, destinó a Raymond Leo Burke, prefecto del Supremo Tribunal de la Signatura Apostólica.

En la Congregación para el Clero trabajarán Donald Wuerl, arzobispo de Washington y Kazimierz Nycz, arzobispo de Varsovia.

En el Supremo Tribunal de la Signatura Apostólica participará el cardenal Velasio De Paolis , presidente de la Prefectura de Asuntos Económicos de la Santa Sede. Y por último, en la Congregación para el Culto Divino colaborarán Amato, Burke, Mauro Piacenza, De Paolis, Nycz y el nuevo cardenal de Sri Lanka y arzobispo de Colombo, Albert Malcom Ranjith.