El Papa ha designado hoy jueves 14 de febrero al cardenal irlandés-norteamericano Kevin Farrell, prefecto de Laicos, Familia y Vida, como nuevo camarlengo de la Iglesia católica, puesto vacante desde que murió en julio el cardenal francés Jean-Louis Tauran.
El cardenal camarlengo es quien dirige la Iglesia durante un periodo de sede vacante, cuando un Papa ha muerto (o ha renunciado, como se dio en el caso insólito de Benedicto XVI).
Comprobar que el Papa ha muerto
Una función del camarlengo es comprobar formalmente que el Papa ha muerto. Tradicionalmente el camarlengo, al lado del lecho del difunto, le llama por su nombre de pila y apellidos 3 veces, distanciadas por 3 minutos. Después golpea suavemente la cabeza del Papa. Comprobada su muerte, le quita el Anillo del Pescador y lo destruye con un martillo en presencia de otros cardenales. También destruye el sello oficial del Pontífice difunto.
El camarlengo cierra los aposentos papales y comunica la muerte al vicario general de la diócesis de Roma, que lo da a conocer a la prensa y la ciudad. Así empieza la sede vacante, que tiene dos objetivos: organizar las exequias papales y llevar a cabo un cónclave para elegir nuevo Pontífice.
El camarlengo durante la sede vacante se responsabiliza del día a día de la Ciudad del Vaticano como Estado, pero no del gobierno espiritual de la Iglesia, que corresponde al colegio cardenalicio y solo para funciones básicas. Durante la sede vacante censan todos los cargos de la curia romana, menos el del camarlengo y el del Penitenciario mayor.
Así, Kevin Joseph Farrell, nacido en Irlanda pero residente muchos años en EEUU, será quien compruebe la muerte de Francisco... a menos que éste se retire antes, como hizo el Papa Benedicto XVI.
Dublín, Salamanca, Roma, Monterrey, Washington, Dallas...
Kevin Farrell nació en Dublín, vivió muchos años en Estados Unidos, estudió en España, en la Universidad de Salamanca y fue ordenado sacerdote en Roma en 1978, ejerció en México en su juventud, capellán en la Universidad de Monterrey y después pasó a Washington, donde fue obispo auxiliar en 2001 con el cardenal MCarrick, cardenal hoy acusado por abusos. En 2007 fue obispo de Dallas y en 2016 el Papa Francisco lo designó para la Curia Romana para ser Prefecto del nuevo "macrodicasterio" reorganizado que sumaba los temas relativos a Laicos, Familia y Vida. Ese año fue creado cardenal.
Su hermano mayor también trabaja en la Curia romana, y desde muchos años antes que él: es el obispo Brian Farrell, desde 2002 vicepresidente de la Comisión para las relaciones religiosas con el Judaísmo y Secretario del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos en la Curia Romana.