Fue una pobre pastora de Villemont, cerca de Bourges, hermosa, modesta y muy piadosa, tanto que, según la leyenda, cuando oraba, una estrella se veía brillar sobre su cabeza. Su belleza atrajo la atención de Bernard, hijo del Conde de Poitiers, quien comenzó a buscar la oportunidad de poseerla.
Estaba un día Solange cuidando las ovejas en un alejado páramo cuando Bernard se acercó a ella y le hizo varios halagos y promesas con vistas a tener relaciones sexuales con ella. Al ver Solange que ninguna negativa hacía desistir al hombre, huyó corriendo del valle. Bernard la persiguió en su caballo, la tomó al galope y la subió sobre el caballo, pero Solange se cayó y quedó mal herida. Entonces el malvado, para no ser acusado de secuestro, la decapitó y la dejó abandonada.
Si bien la historia es cierta y los personajes existieron realmente, para la piedad popular la cosa "sabía a poco" y una leyenda completó el asunto: Solange, con la cabeza cortada, clamó tres veces el Nombre de Jesús, tomó en sus manos su propia cabeza y caminó con ella hasta la iglesia de San Martin en la localidad de Saint-Martin-du-Crot, ahora llamada Saint-Solange), donde cayó muerta. Por esta razón suele representársele entre los "Santos Cefalóforos". Algunas de las reliquias de la santa se veneran en Bourges y Nevers, especialmente su cabeza, trasladada en 1281 a una iglesia dedicada en su memoria en el sitio del martirio.
Santa Solange forma el conjunto de santas pastorcitas francesas, junto a Santa Thorette (1 de mayo), Santa Sigrid (7 de enero), Santa Thumette (4 de mayo y 21 de octubre), Santa Therence (16 de setiembre), y las más veneradas Santa Genovena de París (3 de enero) o Santa Regina de Alesia (7 de octubre).
Por cierto, su asesino al parecer quedó impune, pues vivió hasta 886, año en que perdió la vida en una batalla contra el rey Boso.
-"Vidas de los Santos". Tomo V. Alban Butler. REV. S. BARING-GOULD. 1916.
A 10 de mayo además se celebra a:
San Calepodio, mártir.
San Job, Patriarca.
San Comgall, abad.