Santa Cunera de Rehen, virgen y mártir. 12 de junio (traslación de las reliquias) y 28 de octubre.
La leyenda la hace nada menos que una princesa hija del Rey Aurelio de las Islas Orcadas, Escocia. En 453, conocedora de la peregrinación de Santa Úrsula y sus 11.000 vírgenes a Roma, se unió a ella. De regreso, conocido es que la comitiva de Úrsula fue atacada, y las santas martirizadas. Sin embargo, algunas leyendas tardías han hallado en la leyenda de Úrsula su fundamento para desarrollarse. Así surgieron las leyendas de Santa Aurelia, Santa Avia o Santa VER, que habría sido de estas compañeras de Santa Úrsula que pudieron escapar y hacer su vida de santidad en otros sitios. Una de estas es nuestra santa.
Cunera fue apresada por Radbod, rey de los frisones, la cual, viendo su belleza, dotes y virtudes, la puso al frente de su personal de servicio. Pronto se ganó la admiración y confianza de Radbod y de las demás esclavas por su dedicación, mansedumbre, inteligencia, piedad, caridad con los pobres, etc. Solo le tomó aversión Alunda, la reina, la cual veía con malos ojos la afición que Radbod tenía hacia Cunera. La aversión se transformó en odio y el odio en deseo de asesinarla. Así, un día que el rey estaba de caza, Alunda y una esclava estrangularon a Cunera con un paño, en 454. Fue enterrada en el establo, pensando que allí mismo nadie la buscaría. Pero ocurrió que, llegando el rey y los invitados de la cacería, cuando intentaron entrar al establo, los caballos se negaron a hacerlo una y otra vez. Radbod mandó buscar que era lo ocurrido, se halló la tierra removida y al excavar, hallaron el cadáver de Cunera recién sepultado. Alunda, arrepentida se suicidó lanzándose de la torre más alta del castillo y la esclava fue condenada a muerte en la hoguera.
Radbod levantó un hermoso sepulcro para la mártir en su palacio, donde reposaron sus reliquias, aun sin ser conversos al cristianismo. El 12 de junio de 739 San Willibrord (7 de noviembre) elevó las reliquias, lo que equivale a una canonización actual. En ese momento se comprobó que el paño alrededor del cuello de la santa estaba intacto, y fue separado del cuerpo, conservándose hasta hoy en un bello relicario. Es un paño que ha sido analizado recientemente y es algodón egipcio, datado en el siglo V, por lo se puede considerar auténtico. La iglesia de Rehen venera a Santa Cunera como su más excelsa patrona. Cuando la persecución de los herejes, el noble John Ludofi escondió las reliquias, incluido el paño, siendo devueltas a la iglesia en 1623. El cráneo se venera en Utrech, en la catedral de los Viejos Católicos.
Santa Cunera es abogada de la esquinencia, o sea, las paperas, contra la ceguera y todos los males relacionados con la garganta en general. Es abogada de los animales domésticos, especialmente de los caballos, también es patrona de porteros, conserjes, amas de llaves. Su iconografía se caracteriza por llevar un pañuelo al cuello, recordando su martirio, y también porta unas llaves recordando su oficio de ama de llaves.
A 12 de junio además se celebra a
San Onofre, penitente.
San Odulf de Utrecht, presbítero.