Santa Yolaine de Pleine-Selve, mártir. 17 de enero.
Poco hay fiable sobre esta santa antiquísima, que ya recibía culto en el siglo VIII. Su "vita" fue escrita en el siglo X.
Cuando llegaron a Roma las noticias de los martirios de San Luciano (8 de enero) y San Quintín (31 de octubre), un grupo de mujeres de la nobleza romana se convirtió a Cristo. Entre ellas Santa Benita (8 de octubre), y nuestra Yolaine. Por Cristo, juntaron a un grupo de 12 mujeres y abandonaron sus bienes y familias en Roma para ir a la Galia, a seguir el ejemplo de los santos mártires antes dichos. Visitaron las tumbas de los mártires de Lyon, y luego se separaron para predicar a Jesucristo y alcanzar la palma del martirio. Yolaine se fue a Origny, donde se instaló en una pequeña cabaña junto al río a las afueras de la población. Allí hacía oración, trabajaba y predicaba la fe cristiana.
Al saber de ello, el Gobernador Matroclo, dio una orden para que les trajeran a su presencia a todos los que se convertían y creían en Cristo. Yolaine fue llevada a su presencia, junto a otros cristianos. Primero intentó halagarla, luego la amenazó, para pasar flagelarla con gran crueldad. Llena de heridas, fue arrojada a la cárcel, donde un ángel la sanó, saliendo de la prisión radiante y más fuerte que nunca. Y de nuevo la torturaron, pero la santa permaneció fiel a Cristo. Entonces mandó Matroclo que fuera decapitada, lo que hicieron inmediatamente en 362, imperando Juliano el Apóstata.
El culto a Yolaine es muy reducido, en Pleine-Selve se conserva una capilla dedicada a su memoria.
A 17 de enero además se celebra a
San Teodosio I, emperador.
San Antonio Abad.