San Jorge el Sinaíta, abad. 11 de marzo.
No es mucho lo que de él se sabe, solo un pasaje de la "Vida de los Padres del Desierto" en el que se menciona el que tal vez sea el primer caso de bilocación registrado: Era Jorge abad de uno de los monasterios del Sinaí, a mediados del siglo VI, cuando estando enfermo de muerte quiso visitar a su amigo Pedro, Patriarca de Jerusalén, y comulgar en la basílica de la Anástasis. Entró en oración, y de pronto se halló en la Ciudad Santa, celebraba misa el patriarca y Jorge entró y recibió la comunión. Quiso Pedro saludar a su amigo y luego de la misa mandó buscarlo para comer con él. Pero no le hallaron por ningún lado. Así que escribió a los monjes del Sinaí para preguntarles, algo airado, por qué su amigo no le había saludado y se había quedado tan poco tiempo. Los monjes, asombrados, respondieron que su abad jamás se había movido de la cama, por su mal estado de salud. Y menos para un viaje tan largo y difícil.
El mismo Jorge respondió a Pedro que no se preocupara, puesto que en seis meses se reunirían en el cielo. Como fue realmente.