Lo ocurrido en estas semanas en Bolivia ha sido un escándalo de proporciones mayúsculas. Y es algo que no debería repetirse, y por ello una iniciativa ciudadana ha lanzado en Tufirma.org una petición en la que exigen la dimisión del presidente boliviano, Luis Arce, por su pasividad y/o complicidad con las instituciones públicas que sustrajeron a su familia sin su consentimiento a una niña de 11 años que había sido violada y estaba embarazada de seis meses, que quería continuar el embarazo, pero a la que han obligado a abortar.
La pequeña se encuentra todavía alejada de su madre, aumentando aún más el drama que ya de por sí está sufriendo tras la violación que ha sufrido.
De este modo, en la petición lanzada en Tufirma.org (a la que se puede adherir cualquiera aquí con su firma) se recuerda que en Bolivia “todas las instituciones públicas, desde la Defensoría del Pueblo al Gobierno, se han coaligado para apoderarse” de esta niña.
“No hay muchos precedentes de un crimen semejante en países donde se respeten mínimamente los derechos de las personas. ¡Un crimen inducido y cometido por las autoridades que causará a la menor, ya gravemente traumatizada por las violaciones a las que fue sometida, el daño añadido de haber matado a un hijo que quería tener, violando además los derechos de sus tutores legales!”, insisten en esta denuncia pública dirigida contra el Gobierno de Bolivia.
Por todo ello, la petición de Tufirma.org exige “la dimisión del presidente Arce por el daño causado al prestigio de Bolivia y por su incapacidad para defender los derechos de los bolivianos, en particular los más indefensos: los niños nacidos y por nacer”.
(Puede firmar aquí la petición contra el escándalo protagonizado por el gobierno de Bolivia)
Los antecedentes de este escandaloso caso
El aborto de la niña de 11 años secuestrada por las autoridades se produjo el día 6 de noviembre. Hasta el viernes 5 de octubre, la niña se encontraba en un hogar de acogida para madres perteneciente a la Iglesia que acogía a la menor y a su madre.
Nadia Cruz es la Defensora del Pueblo boliviana desde enero de 2019 y ha sido acusada reiteradas veces de parcialidad política.
La menor había expresado su decisión de dar a luz al bebé, frente a la presión de las autoridades para que abortase. En cuestión de minutos, la situación cambió drásticamente. La reconocida laicista y abortista Nadia Cruz, defensora del pueblo en Bolivia, sustrajo a la niña del centro de acogida para madres -contra la voluntad de la madre- y la internó en un centro médico sin condiciones para atender su estado. Estaba embarazada de 24 semanas de gestación, era ya un bebé seismesino.
El 1 de noviembre, la madre de la niña explicaba en una entrevista televisiva en Unitel que ellas no querían abortar, que iban a tener el bebé y pensaban en la posibilidad de darlo en adopción...
Por su parte, la Plataforma Ciudadana por la Vida y la Familia difundió un comunicado acusando a la Defensora del Pueblo, Nadia Cruz, junto con instituciones gubernamentales y ONGs abortistas de infanticidio y "crimen planificado".
La Plataforma consideró que la niña ha sido obligada a abortar, y que el bebé nació vivo y se le dejó morir, lo que no es sino infanticidio. También señalan que las leyes bolivianas de aborto se refieren a embriones, no a fetos ya de seis meses.
La Plataforma expresaba su “profunda consternación, dolor e impotencia, ante la cruel e inhumana sentencia de muerte a un ser inocente, cuyo infanticidio ha sido consumado, y frente a la puesta en riesgo de la vida de una menor con seis meses de gestación obligada a abortar”.
Ataque de las feministas y abortistas en la catedral de Santa Cruz (Bolivia)
Asaltos a iglesias y catedrales bajo el pretexto de la niña
Utilizando como excusa a esta pobre niña, grupos abortistas encabezados directamente por la propia defensora del pueblo vandalizaron la propia sede de la Conferencia Episcopal de Bolivia. Después, otros grupos asaltaron la catedral de Santa Cruz en plena misa y provocaron disturbios.
Nadia Cruz asumió haber estado presente en los actos contra la sede del órgano de los obispos e incluso haberlos liderado: "Si a la conferencia episcopal le preocupa la participación de la Defensoría del Pueblo, porque ha identificado chalecos de la Defensoría, le digo que yo he ido personalmente y he encabezado la movilización desde la Defensoría del Pueblo hasta la conferencia episcopal, en el ejercicio de nuestras funciones de denuncia por las violaciones de derechos humanos que en este momento está incurriendo la Iglesia”.
Durante días, iglesias en distintos puntos del país fueron igualmente vandalizadas y asaltadas por estos grupos abortistas y feministas que en todo momento han encontrado la complicidad del gobierno presidido por Arce.
Puedes adherirte aquí con tu apoyo en esta campaña de Tufirma.org