En Irak, país de mayoría musulmana, donde quedan apenas 300.000 cristianos, el Gobierno iraquí ha publicado un tuit el 25 de diciembre declarando: “Feliz Navidad a todos nuestros ciudadanos cristianos, a todos los iraquíes y a cuántos la festejan en el mundo”.
Por contraste, en España, donde el 70% de la población se declara católica, el presidente Pedro Sánchez, no se atreve ni a usar la palabra "Navidad" (y mucho menos felicitar a los cristianos) y su tuit del 24 de diciembre sólo declaraba: "¡Que nunca nos falte la ilusión y el coraje para seguir trabajando por aquello en lo que creemos. Por más igualdad, justicia y prosperidad. Os deseo ¡¡felices fiestas!!"
Su tuit utiliza iconitos de unas estrellas que se mueven: un laicista radical podría quejarse, puesto que parece una alusión al relato bíblico de la estrella de Belén.
En cambio, cuando Pedro Sánchez felicita el final de Ramadán sí menciona la fiesta religiosa musulmana por su nombre y a la comunidad religiosa a la que se dirige: "Deseo a todos los musulmanes de España un muy feliz Eid el Fitr. Que el mes de Ramadán que acaba de concluir os traiga, nos traiga a todos, mucha paz. ¡Eid Mubarak!"
Irak, casi sin cristianos, celebra Navidad: la declara festiva
Mientras el Gobierno de España oculta al máximo, como avergonzado, la existencia de su población cristiana y sus símbolos, Irak, por el contrario, ha decidido declarar que el día de Navidad latina (25 de diciembre) sea festivo para todo el país. Hasta ahora era festivo solo para los cristianos.
Irak no es el primer país musulmán de Oriente Medio en tomar esta decisión. Previamente, también Líbano, Jordania y Siria decretaron ya desde hace unos años que la Navidad fuese festivo para todos.
El Gobierno iraquí respondió así a una petición del cardenal iraquí y Patriarca de los católicos caldeos Luis Raphael Sako, que pidió este festivo y señaló los precedentes de las naciones árabes vecinas. El cardenal Sako es el Patriarca de unos 600.000 católicos de rito caldeo, pero la mayoría viven ya fuera de Irak, ya que desde la invasión norteamericana de 2003 han ido abandonando el país, golpeados por la inseguridad y la miseria. Antes de 2003 había un millón y medio de cristianos de distintos ritos e iglesias en el país: hoy quedan unos 300.000.
El cardenal Sako pedía al presidente del Parlamento, Mohamed Halboussi, “que sea aprobada una nueva ley” para que la Navidad sea “fiesta oficial en Irak (...) en consideración del respeto que los hermanos musulmanes tienen por Cristo”. Y así lo ha aceptado el Gobierno, que aprobó una enmienda a la ley que regula el calendario de las festividades y reconoce ahora la oficialidad “del nacimiento de Jesucristo”, como festivo para todo el país, no solo para los cristianos.
El cardenal Parolin, enviado papal a la Navidad iraquí
Este año, los cristianos iraquíes se han visto acompañados por el secretario de estado vaticano, el cardenal Pietro Parolin, enviado por el Papa Francisco en visita oficial del 24 al 28 de diciembre. Después de haber visitado la capital, concelebrando la misa de medianoche y se encontró con los más altos cargos institucionales y de gobierno, entre los cuales el presidente de la República y el Premier Adil Abdul Mahdi, partió para Erbil y la llanura de Nínive, última etapa de su viaje, donde habitan muchos cristianos desplazados.
Recientemente, además, el Gobierno iraquí ha adoptado una serie de medidas para contrastar el secuestro de bienes y propiedades de los cristianos en el país, sobre todo de aquellos que tuvieron que emigrar por las violencias y las persecuciones. Entre éstos, la obligación de la presencia del propietario (cristiano) de un inmueble en el acto de transferencia de la propiedad en las oficinas de catastro. Es una medida dirigida a evitar la práctica difundida de la falsificación de actas de venta, que llevó a despojo de miles de bienes en los últimos años, señala la agencia AsiaNews.