El Obispo de la diócesis fronteriza de Las Cruces (Estados Unidos), monseñor Oscar Cantú, dio a conocer algunos avances en la investigación que realiza la diócesis a una imagen de bronce de la Virgen de Guadalupe que ha “llorado” desde mediados del mes de mayo. En declaraciones a la prensa y que recoge el canal de televisión EWTN, el prelado explicó que “algunos de los testigos dicen que (la sustancia) huele a rosas y que es similar al aceite que consagro cada año para los bautizos, las confirmaciones y la ordenación de sacerdotes”. Hasta el momento, la investigación va en la línea de apoyar lo dicho por el obispo ya que, para determinar la naturaleza de la sustancia, se hizo un análisis en un laboratorio y el resultado fue que las lágrimas son de un aceite de oliva perfumado.
En mayo y mientras celebraba Misa en la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe, el P. José Segura vio algunas “lágrimas” sobre el rostro de la imagen mariana que, según algunos de los testigos, olían a “rosas”. Desde entonces muchos fieles han llegado hasta la iglesia ubicada en el condado de Hobbs para conocer más sobre lo ocurrido y venerar a la Virgen María.
El obispo también explicó que examinaron “el interior de la imagen hueca y no hay nada dentro que no deba estar ahí, a excepción de telarañas. Hemos tomado fotos y hemos revisado”. Algunos investigadores pensaban que las lágrimas podrían haber sido el resultado de la cera residual usada en el proceso de fundición del bronce, pero todo parece indicar que esa es una hipótesis descartada. Monseñor Cantú precisó que quienes hicieron la imagen le indicaron que, debido al calor utilizado, era imposible que quedara algún rezago de humedad en la ella. El Obispo refirió también que aún no se ha encontrado alguna pista o información que señale que lo que ocurre es un fraude. Antes de tomar una decisión final sobre la naturaleza de las lágrimas, el Prelado va a buscar consejo. “Estoy revisando las mejores formas de proceder. Si bien yo tengo la decisión final, voy a apoyarme en la sabiduría del Papa Francisco”, agregó.
Monseñor Óscar Cantú, Obispo de Las Cruces (Estados Unidos)
Sobre las personas que llegan hasta la parroquia de Hobbs, comentó que ha “leído la mayoría de los testimonios escritos y son historias de una gran fe. De gente que está luchando con grandes sufrimientos y que ha experimentado un consuelo espiritual, han visto a María caminar con nosotros”. Para muchos católicos en esta diócesis fronteriza la imagen ha sido una gran ayuda: “No puedo sino pensar en mis propias lágrimas por la gente pobre que viene a la frontera, huyendo de situaciones que amenazan sus vidas. Las lágrimas de los niños que son separados de sus padres. Hay muchas razones por las cuales llorar y Dios está con nosotros en estos momentos”, dijo el Obispo de Las Cruces.
El 11 de julio monseñor Cantú fue designado Obispo Coadjutor de la diócesis de San José en el estado de California y asumirá su nuevo cargo a fines de septiembre. Antes de irse, el prelado quiere visitar la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe para ver por sí mismo la imagen. Mientras tanto, la investigación diocesana prosigue con normalidad.