Meses después de que Matt Walsh recorriese medio mundo buscando la respuesta a la pregunta ¿qué es una mujer? y lo difundiese a través del documental con el mismo nombre, las autoridades estadounidenses parecen haber dado con una respuesta, al menos en parte. Y no es la que todo el mundo esperaba: las mujeres, sean madres o no, podrían comenzar a ser consideradas como meras "donantes de óvulos".
El protagonista de los hechos es el mediático subsecretario de salud de la administración Biden, que se autopercibe como mujer bajo el nombre de Rachel Levine.
La semana pasada visitó la clínica de afirmación de género Identity Alaska recientemente inaugurada, alentando al centro a promover una "atención médica" que a su juicio "salva vidas", recoge Daily Mail.
Pese a haber nacido y vivido como un hombre, siendo alumno de la facultad de medicina y padre, Levine desencadenó una "transición" de género que le ha llevado a ser uno de los principales promotores de los Estados Unidos en las operaciones de cambio de sexo y todo lo que implica en el plano teórico también en menores.
Solo así se entiende que, durante su visita, secundase las propuestas de una clínica partidaria de que los niños aprendan que cuando uno niño nace, los médicos les asignan el género a través de "suposiciones".
Entre las opiniones de la clínica secundadas por Levine también se encuentra la biología inclusiva de género o que los profesores se dirijan a los niños "sin asumir que solo hay dos sexos", entre otras.
"El padre gestante lleva al feto" o "donante de óvulos"
Una de las propuestas más destacadas de esta clínica en torno a la modificación del lenguaje se incluye considerar la posibilidad de los "padres gestacionales", la supresión de "órganos reproductores masculinos" o que la palabra "hombre" se sustituya por "individuo XY". En lugar de "la madre lleva el feto durante 9 meses", el grupo Identity pretende que los profesores digan: "El padre gestante lleva el feto durante 9 meses".
La modificación de la realidad promovida por Levine y la clínica llega al punto de desoir la misma biología y proponer que a las "fiestas de revelación de género" se les llame "de revelación de cromosomas", como si estos pudiesen alterarse con desearlo.
Hace unas semanas, Levine protagonizó una nueva polémica con sus declaraciones al promover los cambios de género en menores, afirmar que estos son equiparables a la "atención médica" y que "se basan en la evidencia" o que los procesos de afirmación tienen "el máximo apoyo" de la administración Biden.
Sin embargo, aunque también es partidario de la administración de bloqueadores de la pubertad en niños, el mismo Levine celebra haber esperado a llevar a cabo su "transición" por la posibilidad que le brindó de tener una familia.
"Si la hubiera hecho cuando era más joven, no habría tenido a mis hijos", expresó en 2019. Una alegría que, sin embargo, no le preocupa dificultar a otros menores que por acceder a estos tratamientos puedan quedar incapacitados para la paternidad o maternidad de por vida.
Para la presidenta y fundadora de la organización próvida Live Action, Lila Rose, referirse a una madre como "donante de óvulos" forma parte de "un ataque generalizado a lo que supone ser mujer".
"Las mujeres están bajo ataque. Estamos siendo deconstruidas y atacadas. Nuestra capacidad, nuestro `superpoder´ para traer vida al mundo lleva décadas siendo atacado", expresó Rose.
Se trata, a su juicio, de "un ataque a todas las mujeres" que "no debería ser tolerado". Levine, agregó, es un hombre biológico que vive como una mujer mientras ataca a las mujeres biológicas que son madres.