Ante esta tropelía los vecinos decidieron reaccionar con ingenio. Durante los últimos días, desde una vivienda se proyectaba un holograma de la cruz retirada y que quedaba reflejada en el muro de la iglesia.
Y el Ayuntamiento ha perseguido también esta imagen de luz hasta eliminarla. Según informa el diario Información, el consistorio intentó neutralizar el holograma proyectado en el muro de la iglesia encendiendo la iluminación exterior del templo, precisamente el cual llevaban ya años sin utilizar dicha iluminación.
Sin embargo, como el resultado no era el esperado desde el Ayuntamiento pasaron al ataque dirigiéndose directamente contra la vecina desde cuya casa se realizaba la proyección. La mujer ha recibido en su domicilio una multa de 100 euros por parte de la Policía Local por la proyección sin permiso sobre la vía pública y por el uso de megafonía para el rezo de oraciones y de pasajes del Evangelio.
Toni Illán, portavoz de la Plataforma Ciudadana en Defensa de la Cruz, habla de “boicot” por parte del Ayuntamiento y que “esto demuestra que no retiraron el monumento por su simbología, como alegaron. Ahora, con una cruz de luz, que ni se puso en época franquista, ni recoge nombres de ningún bando, sólo una imagen que recuerda a la Cruz en su lugar, junto a la iglesia, está siendo boicoteada por el Ayuntamiento.
“Este es el señor alcalde el que persigue el franquismo, pero silba el himno de Riego, el que no tiene nada en contra de la religión cristiana pero que se declara abiertamente ateo y boicotea la iluminación de una cruz en la fachada de una iglesia, es el azote de la dictadura franquista pero es el mayor dictador de su época y en sus territorios enviando a la Policía e interponiendo denuncias contra los vecinos que ayuden a quien no piense como él”, afirma la plataforma en un comunicado.