La desaparición de la cruz, para atender las “exigencias” de la clientela musulmana y a los clientes que no son de fe cristiana, en un supermercado de la cadena alemana Lidl, ha desatado un auténtico calvario mediático, explica el diario ABC. En su local de Camporosso en Liguria, en el norte de Italia, la dirección del coloso alemán de la distribución decidió quitar las cruces de la fachada y de la torre de una iglesia que aparece en una gran fotografía sobre la pared, frente a la caja del supermercado, una imagen utilizada como un enorme póster.
 
Se trata de la iglesia de Dolceacqua, un pueblo de 2.100 habitantes -a 6 kilómetros de Camporosso-, un típico pueblo medieval en el valle del río Nervia, a lo largo del torrente homónimo. Es uno de los lugares símbolo de la Riviera de Poniente, en la región de Liguria, conocido también fuera de Italia. La imagen del torrente con las casas que llegan hasta los pies del castillo de los Doria, situado en el centro histórico del municipio, es una de las más conocidas y fotografiadas de este bello panorama. Sin duda, la postal más popular del pueblo. Una imagen inmortalizada también en un cuadro de Claude Monet.
 

El alcalde de Dolceacqua, Fulvio Gazzola, montó en cólera contra el supermercado Lidl: “Es un hecho que daña la imagen de nuestro pueblo y de nuestras tradiciones cristianas. Pueden utilizar la foto de Dolceacqua y nos agrada, porque es un símbolo de la zona y un lugar muy conocido. Pero si quieren hacerlo, deben respetar la realidad de los hechos: En la iglesia están las cruces, símbolo de tradición antes que de religiosidad”, manifestó a La Stampa el regidor de Dolceacqua. En una nota enviada a Lidl, el alcalde advierte que “el ayuntamiento se reserva su derecho de utilizar las vías legales”.
 
La cadena de supermercados pretendía, manipulando la fotografía, no molestar a sus clientes musulmanes, pero se ha metido un autogol. Lo que ha conseguido es herir la sensibilidad de muchísimos clientes italianos. El supermercado ha tenido que dar marcha atrás. Ha admitido su error: “Difundiremos un nuevo cartel con las fotos de las iglesias de Dolceacqua con sus cruces”. A Lidl no le quedó otra solución. La líder del partido “Hermanos de Italia” había hecho una declaración mostrando su deseo de que los cristianos hicieran sentir su indignación y no entraran más en el supermercado, lanzando en las redes sociales el hashtag #boicottaLidl.