Sagredo, propietario del local de McDonald’s de la ciudad de Talavera de la Reina en la provincia española de Toledo, envió su declaración a ACI Prensa en la que “en nombre mío y de todo el equipo del restaurante quiero pedir disculpas públicas por este desafortunado incidente, que en ningún momento ha sido intencionado".
"En cualquier caso -prosigue el texto- la decoración por motivo de Halloween responde a una iniciativa exclusivamente local de mi restaurante, por lo que este asunto está al margen de la marca".
"Sinceramente pido disculpas a todas las personas que se hayan sentido ofendidas por este involuntario y desafortunado incidente", reiteró.
La imagen de la polémica. Cero sensibilidad hacia los cristianos
El delegado episcopal de misiones de la diócesis de Toledo, Fernando Redondo, condenó el hecho a través de su cuenta de twitter donde cuestionó: “¿Así se respeta la libertad religiosa? Vergüenza”.
Por su parte el P. Emilio Palomo, sacerdote de la archidiócesis de Toledo, también repudió en twitter la colocación de la imagen manifestando su “dolor y repulsa”.
El diario español La Gaceta informó que el sacerdote de Alcaudete de la Jara en Toledo, P. Juan Antonio Pérez Revenga, cuestionó lo ocurrido: “¿No hay otra forma de decorar el establecimiento para (…) Halloween que haciendo daño? ¿Es necesario esto? ¿Por qué no ponen un buda decapitado o mejor una imagen de Mahoma decapitado? Esto es muy fuerte".
El presbítero animó a “los que quieren a la Virgen y al Señor” a no comer en McDonald’s y dijo que si sus encargados “no saben respetar, nosotros les vamos a dar donde más les duele: en el bolsillo”.