Cristina Cifuentes (PP), presidenta de la Comunidad de Madrid, ha confirmado ante preguntas de los periodistas que la Administración autonómica que preside ha abierto "un expediente informativo previo" a la coach Elena Lorenzo, que ofrece ayuda desde su web http://elenalorenzo.com a quien quiere "dejar atrás" la homosexualidad. Cifuentes añade que de ese expediente se verá "que tipo de sanciones se pueden poner". 

Así lo ha declarado esta dirigente autonómica del Partido Popular cuando salía de firmar en el libro de condolencias por el terremoto de la Embajada italiana en Madrid. 

"Se acaba de abrir un expediente informativo previo, del que habrá que extraer las conclusiones para ver si se efectivamente ha conculcado la Ley y qué tipo de sanciones se pueden poner, pero eso se está instruyendo de momento", ha dicho la presidenta del Gobierno regional.

Sobre la nueva ley que pemite multar a quien hable de abandonar los sentimientos homosexuales  la política ha declarado que esa ley "permite poder ir en contra de situaciones que suponen una discriminación de hecho y un ataque sobre todo a la libertad de las personas y que va en contra de lo que queremos implantar, que es la tolerancia y admitir la diferencia y no considerar ni mucho menos que la homosexualidad es una enfermedad". "A mí eso me parece un disparate, evidentemente", ha concluido.

Por su parte, la coach Elena Lorenzo ha explicado con detalle que ella nunca habla de "curar la homosexualidad" sino de "dejar atrás" la homosexualidad, en una detallada entrevista que hemos publicado en Religion En Libertad.

La normativa autonómica madrileña multaría con hasta 45.000 euros a quien ofrezca ayuda a alguien que quiera abandonar sus sentimientos homosexuales ("cualquier intervención médica, psiquiátrica, psicológica o religiosa que persiga modificar la identidad de género u orientación sexual de una persona").


Publicidad en el Facebook de Cristina Cifuentes, orgullosa de la ley de ideología LGBT  que multa a quien piense distinto al lobby

Bajo estas líneas, fragmentos de la normativa madrileña y sus multas LGBT: cualquier intento de modificar la "orientación sexual" (incluso una mera oración, ya que impide "intervenciones religiosas") será considerado "infracción muy grave"






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