Desde ese momento hace exhibicionismo de su militancia gay en un país hispano y muy cristiano, que ni reconoce el matrimonio del mismo sexo ni valora esas relaciones. (El 78% de dominicanos está en contra del matrimonio homosexual según una encuesta de 2015).
Esa misma noche del nombramiento el 22 de noviembre, después de 25 años de relaciones con su pareja, Bob J. Satawake, celebraron una "boda gay" (según las leyes de Washington DF) cerca de la Casa Blanca para poder acudir a la sociedad dominicana como "marido y marido"...
Desde entonces no han cesado de acudir juntos y ostentosamente a colegios dominicanos, encuentros deportivos, fiestas infantiles, etc... con el objetivo de "educar" a los dominicanos en los nuevos valores del poderoso vecino norteamericano. Nada más llegar a la isla, por ejemplo, emitieron un vídeo como sonriente pareja por Internet dirigido a la sociedad dominicana, algo que no hacen el resto de embajadores en el país con sus esposas.
Brewster y Satawake en su vídeo para adoctrinar a los dominicanos en los valores del día del Orgullo Gay
En EEUU hay un millón y medio de inmigrantes dominicanos, y cuando alguno ha protestado al verlo como una colonización cultural (por usar una expresión frecuente del Papa Francisco) el embajador ha sugerido -aunque luego se ha desmentido- que su embajada podría retirar algunos visados (visas, en español latino).
Hartos de prepotencia y propaganda del lobby gay desde la embajada norteamericana, los obispos de la Conferencia Episcopal de República Dominicana (12 obispos en ejercio y seis eméritos) han publicado un documento conjunto muy crítico con los 27 meses de activismo de la pareja.
No es nada común en la historia de la diplomacia en el continente americano que los obispos de un país emitan un comunicado contra un embajador extranjero: responde a una situación realmente peculiar que molesta a la población.
Los obispos piden al Gobierno dominicano que proteste formalmente ante las autoridades de Washington.
“Durante los últimos años hemos visto una y otra vez cómo el señor embajador se ha extralimitado en sus funciones, mostrando poco respeto a los usos y costumbres de nuestra sociedad, y violando tanto la Constitución de la República como la Convención de Viena Sobre Relaciones Diplomáticas que rige la diplomacia internacional actual y que fue ratificada por Estados Unidos y República Dominicana”, denuncian los obispos.
“Nos anima el mismo espíritu que señala el Papa Francisco cuando, refiriéndose a las amenazas que vive la familia, previene contra las «pseudo-soluciones desde perspectivas que no son saludables a la familia, sino que provienen claramente de “colonizaciones ideológicas”. El Señor Brewster se acerca a nuestra niñez en escuelas públicas y privadas, en torneos deportivos y otras actividades juveniles e infantiles exhibiendo al Señor Bob Satawake como su esposo. Esto ha causado un gran malestar en los padres de familia, que tienen el derecho a definir cómo educar a sus hijos, y sienten esta visita como una intromisión de valores contrarios a los que ellos quieren inculcar a sus hijos”, continúa la nota, haciéndose eco tanto del Papa Francisco como de las familias dominicanas molestas.
Y prosigue la nota: “El Embajador y su pareja presentan a los niños un modelo de familia que es incompatible con el que está contemplado en la Constitución [de República Dominicana] que en su artículo 55 dice: «La familia es el fundamento de la sociedad y el espacio básico para el desarrollo integral de las personas. Se constituye por vínculos naturales o juriídicos, por la decisión libre de un hombre y una mujer de contraer matrimonio o por la voluntad responsable de conformarla». Ellos están tratando de confundir a nuestra juventud y niñez presentándoles un modelo distorsionado de familia, menospreciando, de esta manera, la autoridad de nuestras leyes".
Brewster hace colgar la bandera del lobby gay - un lobby particular que no representa ni a la población de EEUU ni a la dominicana- en la embajada norteamericana de Santo Domingo
A los obispos les molesta también que el embajador del país más poderoso del mundo use técnicas victimistas, alternándolas con amenazas veladas.
"El Señor Brewster se presenta en la sociedad como una víctima, llamando “odio” a toda opinión contraria a la suya, pero alardea de tener el apoyo de su Gobierno para realizar las violaciones sistemáticas de las leyes nacionales e internacionales", denuncian los pastores
Los obispos también denuncian las amenazas del embajador gay contra el millón y medio de trabajadores dominicanos en EEUU, cuando en su discurso en la Cámara Americana de Comercio respondió a las acusaciones de entrometerse en la cultura de otro país que a quien lo le guste que devuelva el visado.
Aunque se desmintiese oficialmente, comenta la nota de los obispos, queda el miedo a expresarse por temor. "Esto lesiona la libertad de expresión en nuestro país", acota el comunicado de los obispos dominicanos.
Los obispos ven también preocupante "la insinuación de oferta de dinero que hiciera la USAID [organización pública de EEUU de ayuda al desarrollo internacional] a los candidatos políticos que apoyen a los LGBT. Este anuncio se hizo en el marco de apoyo a la Embajada de Estados Unidos durante el lanzamiento de la Cámara de Comercio LGBT. Ofrecer dinero para financiar a candidatos que estén dispuestos a promover su agenda es una violación a la soberanía nacional y a sus leyes electorales y representa un chantaje grave hacia la política nacional. Además, aunque se pretenda desmentir, ¿Quién garantiza que, de todos modos, el fondo constituido no sea erogado aún veladamente?”, preguntan los obispos.
Por eso los obispos piden a los políticos dominicanos "utilizar los mecanismos que las normas diplomáticas prevén para elevar una protesta formal al Gobierno de Estados Unidos acerca de las extralimitaciones de su embajador en tierra dominicana".
Pero el caso de Brewster en República Dominicana no es el único caso de "colonizaciones ideológicas" por parte del lobby gay desde la superpotencia norteamericana. Obama ha dedicado sus mandatos a exportar embajadores activistas de esta ideología por todo el mundo: así envió en 2009 al abogado David Huebner a Nueva Zelanda y Samoa y en 2013 a James Costos como embajador en España y Andorra, John Berry (Australia), Ruffus Gifford (Dinamarca) y Daniel Baer (embajador ante la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa, OSCE). Todos ellos, con una alta implicación en la agenda del homosexualismo político.