El juzgado de instrucción 10 de Sevilla ha citado como imputadas por un delito contra los sentimientos religiosos a tres feministas radicales que participaron en una procesión en la que portaban una gran vagina de dos metros -en la que podía deducirse una alusión a los pasos procesionales de figuras marianas- durante una manifestación del Primero de Mayo del 2014.
Fuentes judiciales han informado a Efe de que estas imputaciones se suman a las que la juez acordó respecto a dos sindicalistas de la CGT, que convocó una manifestación del 1 de mayo, a la que se sumaron las mujeres imputadas, y otra previa en abril contra un despido laboral de una mujer, por razones de sexo, que luego ganó el caso.
Las mujeres imputadas forman parte de la Asociación Aquelarre Feminista Sevillano, que portaron el que denominaron "coño insumiso", y han sido imputadas tras la identificación de la Policía a instancia de la juez.
La actuación judicial se produce después de la denuncia presentada por la Asociación de Abogados Cristianos por un delito contra los sentimientos religiosos en concurso con un delito de provocación a la discriminación, al odio y a la violencia por motivos referentes a la religión o creencias.
La asociación consideró que en las manifestaciones "se recreaban procesiones de Semana Santa, escenificadas en tono de burla" y se quejaron de que las procesiones se celebraron "a ritmo de tamborada y presidida por el ´paso´ de una vagina de plástico de un par de metros de altura a modo de Virgen, portada en andas".
El pasado 17 de septiembre declararon como imputados en este caso el secretario general de Sevilla de CGT, Miguel Sevillano, y el secretario de Organización de Andalucía, Félix Cervera, que ciñeron la manifestación a cuestiones laborales y negaron que hubieran proferido insultos ni que despreciaran o humillaran a nadie.
Durante la comparecencia, y en las inmediaciones de los juzgados, medio centenar de militantes del sindicato CGT, acompañados por tambores y la imagen que denomina "El coño insumiso" pidieron la libertad de los dos procesados por exhibir esta imagen, que portan en andas, como si fuese una procesión religiosa.