Para el sacerdote Pedro Trevijano (Logroño, 1938) no han sido una sorpresa ni el auge de la ideología de género ni sus manifestaciones más radicales. Fue uno de los primeros en denunciarla, como conocen bien los lectores de ReL, pues es uno de nuestros más antiguos y constantes colaboradores.
Acaba de publicar un nuevo libro al respecto, Lo que un católico debe saber sobre la ideología de género, que puede descargarse gratuitamente pinchando aquí.
"¿Por qué es importante leer Lo que un católico debe saber sobre la ideología de género?" , se pregunta Álex Rosal, director de ReL, en el prólogo del libro: "Porque los retos existenciales a los que nos enfrentamos", responde, "son tan devastadores e invasivos
que necesitamos tener unas cuantas ideas claras que nos den un poco de luz, y que podamos trasladar a nuestros hijos y nietos".
Y para ello Pedro Trevijano es la persona idónea, por su formación y por esta acostumbrado, como profesor, a ser didáctico.
Además de ser doctor en Teología Moral por la Academia Pontificia Alfonsiana, Trevijano tiene dos licenciaturas civiles (Derecho en Valladolid y Filosofía en Comillas) y dos eclesiásticas (Derecho Canónico y Teología), ambas en la Pontificia Universidad Gregoriana. Pasó en Roma nueve años completando todos esos estudios, antes de regresar a España y sumar, a sus ministerios parroquiales, muchos años de docencia en institutos de enseñanza media de su Rioja natal.
Pedro Trevijano recibió en 2021 el Premio Religión en Libertad en la categoría Letras Breves, en homenaje a sus miles de artículos evangelizadores y combativos.
Pocas semanas antes de la publicación de esta obra, el 25 de febrero, cumplió sesenta años de sacerdocio. "Hoy, desde luego, si pudiese echar marcha atrás y volver a plantearme del todo mi vida, sería de las cosas que tengo más claras: volvería a serlo, pues estoy encantado de haber sido sacerdote y continuar siéndolo. Sin duda alguna, creo ha merecido la pena apostar la vida por Cristo", confesó entonces, al celebrarlo.
-Eran tiempos muy distintos...
-En aquella época ya existían movimientos contestatarios como el del celibato opcional...
-¿Qué le parecían?
-Lo que un pastor protestante, tras una reunión con ellos, les dijo: ”Las soluciones pastorales que proponéis llevamos cuatrocientos años aplicándolas con el resultado de tener las iglesias vacías”.
-¿Había tendencias en el ambiente que anticipasen un dislate como el de la ideología de género?
-No nos olvidemos que Simone de Beauvoir y Wilhelm Reich son de los años cuarenta del siglo pasado, aunque la ideología de género sólo haya sumado verdadera fuerza en este siglo XXI...
-¿Tuvo en el feminismo su gran precedente?
-El feminismo de la primera generación era un movimiento legítimo que ha conseguido sus objetivos. Es el feminismo radical, unido a la ideología de género el que es sumamente peligroso porque son ideologías totalitarias. Y es lo que tenemos hoy.
-Usted dijo desde el principio que a la ideología de género la mataría el deporte femenino. ¿El tiempo le está dando la razón?
-Dado que pienso que las mujeres no son tontas, es indudable que no pueden aceptar competir con varones en condiciones de igualdad, porque eso supone dejarse robar las medallas y las becas. Varias federaciones deportivas ya han espabilado.
-¿Por qué denomina a esta ideología "la moral del diablo"?
-La ideología de género no cree en Dios ni en la resurrección de Jesucristo. Salvo la violación, que también condenan, la ideología de género defiende todo lo contrario a lo que defiende la Iglesia. El aborto, la corrupción de menores, la fornicación, las relaciones homosexuales, la destrucción de la familia con la aceptación de todas las relaciones sexuales salvo la de los cónyuges entre sí, la lucha contra la patria potestad y la educación de los hijos no por los padres, sino por el Estado, la eutanasia y más cosas... Y es que cuando nos separamos de Dios, acabamos haciendo toda clase de majaderías. Que es la Moral del Diablo es algo afirmado por los tres últimos Papas.
-Desde su contacto con las familias a través de la enseñanza, ¿cree que los padres españoles están concienciados del poder adoctrinador del lobby de género?
-Aunque la concienciación va mejorando, todavía es muy escasa.
-¿Qué deben hacer quienes sean conscientes de este peligro?
-Evidentemente, educarlos según el leal saber y entender de los padres, respetando las personas, pero diciéndoles que las tonterías son tonterías y una de ellas es sostener que hay más de dos géneros. En la escuela, recordar que según la Constitución y la Declaración de Derechos Humanos los padres tienen derecho a decidir qué tipo de educación quieren para sus hijos, uniéndose con otros padres para no tolerar que se pisoteen sus derechos.
-¿Qué podemos proponer los católicos?
-Creo en la sabiduría de Jesucristo y en la del Magisterio de la Iglesia, y pienso que allí es donde encontramos las orientaciones sobre cómo debemos actuar, sin olvidar el papel de las ciencias humanas, que nos dicen por ejemplo que en la especie humana sólo hay varones y mujeres.