Después de dos semanas de agitación en el Partido Socialista, con su líder Alfredo Rubalcaba hablando de revisar o eliminar los acuerdos de España con la Santa Sede y la portavoz Elena Valenciano mencionando a la Iglesia día sí, día no, la manifestación de "ateos y librepensadores" en Madrid, convocada para este viernes a las ocho de la tarde demostró el poco interés de la ciudadanía madrileña por el asunto, con apenas un centenar de participantes.
La manifestación no ha merecido ni siquiera el interés de publicaciones radicales como los digitales anticlericales "Público" o "El Plural".
Las asociaciones ateas de Madrid habían convocado con estas reivindicaciones para manifestarse por el barrio de Lavapiés:
- Sin subvenciones a las iglesias, tendremos la mejor enseñanza del mundo
- Por una escuela pública y laica para ganar el futuro
- Por la libertad de expresión y manifestación
- Derogación de los acuerdos con el Vaticano
- Que la religión deje de formar parte el horario lectivo, saliendo de la escuela
- Que ninguna simbología religiosa tenga presencia en los centros escolares
- Que con dinero público no se financie el adoctrinamiento religioso
- Separación total Iglesias-Estado
Los manifestantes, alrededor de un centenar, repitieron los eslóganes clásicos del anticlericalismo español moderno:
-Menos religión y más educación
-Fuera rosarios de nuestros ovarios
-Menos crucifijos y mas trabajo fijo
-Menos curas y mas cultura
Este año, como en los anteriores, la organización atea había solicitado poder manifestarse el Jueves Santo, pero la convocatoria llegó a la Delegación de Gobierno fuera de plazo. Con el PP en el gobierno y el peligro de coincidir con procesiones y devotos y advertirse un sentido de injuria y provocación, probablemente se les habría denegado.
Además, en esta ocasión los convocantes no recurrieron esta decisión ante al Alto Tribunal madrileño. Tras la negativa, tanto en 2011 como en 2012 como en 2013 volvieron a solicitar poder manifestarse en fechas posteriores a Semana Santa, algo que consiguieron.
Las fotos (publicadas en Twitter por las mismas asociaciones ateas, es decir, de un fotógrafo cercano a su causa) muestran claramente lo desinflado y desangelado del acto.
Quedan muy lejos los días de la Jornada Mundial de la Juventud, en los que unos 2.000 o 3.000 anticlericales, radicales homosexualistas y elementos anarquistas atacaban a niñas de 16 años por el centro de Madrid o les gritaban mientras rezaban, o les insultaban mientras tenían que salir protegidos por la policía.