Este martes tuvo lugar en Madrid la presentación del segundo libro traducido al español del terapeuta Richard Cohen, "Abriendo las puertas del armario" (LibrosLibres), que sostiene que "no se nace gay" y que es posible dejar de experimentar atracción por el mismo sexo (AMS).

Al contrario de lo que sucediera un año antes en otro acto de presentación con la presencia de Cohen, al que acudieron numerosas personas homosexuales que se expresaron con gran vehemencia (ReL lo explicó aquí con detalle), en esta ocasión los adversarios de las tesis del terapeuta norteamericano no se presentaron, quizá seducidos por un interesante partido de fútbol entre el Real Madrid y el F.C. Barcelona.


Así, en un ambiente abierto y tranquilo, el editor de LibrosLibres, Álex Rosal, explicó que "ni Richard Cohen ni nuestra editorial pretendemos imponer nada a nadie, porque nos gusta la libertad y no boicotearíamos libros que no compartimos. En España hay unos 3.000 títulos de distintos géneros literarios que proponen la afirmación gay, y apenas 10 o 12 que ofrecen una alternativa. Nos dolió que el anterior libro de Cohen, Comprender y sanar la homosexualidad, que llevaba 10 años en el mercado español, escrito sin ofender a nadie, escrito con amor hacia todos, fuese criticado tan injustamente, y que grupos del movimiento LGTB trataran de retirarlo del mercado".

¿Por qué la editorial insiste entonces con otro título complementario sobre esa temática?

"Pues porque de 400 títulos que hemos publicado, ninguno ha generado tantas cartas de agradecimiento, ánimos y felicitación como éste. ¡También ha generado muchos mensajes críticos! Pero "Abriendo las puertas del armario" complementa el libro anterior, y si estos libros pueden ayudar a alguien, habremos cumplido nuestro objetivo", señala Álex Rosal.


Habló también la mexicana Desirée Carlson, directora para toda Iberoamérica de la Fundación Internacional para la Sanación, que promueve estas terapias. Ella conoció el anterior libro de Cohen precisamente en España, hace 10 años, durante un viaje que hizo porque quería aprender flamenco.

»Cuando mi madre se divorció, recibimos mucho apoyo de su mejor amiga, que se veía a sí misma como lesbiana. Yo quise mucho a esa mujer y anhelaba conocer su corazón y aquí en España vi el libro de Richard, y lo leí, y decidí: ´yo tengo que hacer esto en México, ayudar así a las personas´. Acabé mi licenciatura y busqué a Richard Cohen en EEUU y le pedí que me entrenase para dar esa terapia en México. Yo era muy joven, una bebé, pero él confió en mí, me apoyó y desde 2007 empecé a trabajar en este área.

»Queremos evitar que se nos vea como anti-gay, queremos lograr un diálogo distinto, y lo cierto es que América Latina no está tan polarizada como España en este tema. Nosotros hablamos de heridas del pasado que causan la AMS, ellos lo leen como si hablásemos de ´enfermedad´ y ante eso se cierran. Nuestra experiencia es que cuando solo buscamos ´convencer de lo correcto´ no llegamos a la persona con AMS. Es mejor hablar desde la experiencia y la posibilidad y llegar a un mejor diálogo. Quizá nuestro siguiente paso debe ser escuchar más, también a los militantes del lobby gay, ¿por qué no? Preguntarles "¿cómo podemos ayudar a las personas?" y escuchar. Al final, esto es una gran aventura de amor, en la que invitamos a construir vínculos para sanar, para liberar, hablando de la posibilidad más que de la verdad.


Richard Cohen resumió su experiencia: la de un hombre que ha estado en todos los ángulos de la cuestión, y que, como dice en su libro, cometió todos los errores posibles, lo que le ha ayudado a ser un terapeuta especialmente bueno.

»Nunca quise tener esos sentimientos AMS, pero los tuve desde muy pequeño. Durante años pedí a Dios que me los quitase, y como no se iban, pensé que Dios no me escuchaba. No lo hablé con mis padres ni con nadie; tenía miedo a ser rechazado. Estaba sólo. ¿Querríais algo así para vosotros, vuestros hijos o nietos? Eran finales de los años 60, sin Internet, apenas sin libros sobre el tema.

»Fui a terapeutas que me dijeron que nací así y debía aceptarlo, pero yo sabía que -al menos en mi caso- no era así, porque siempre supe que quería tener hijos y una esposa. Alguien en mi Iglesia me dijo que la mujer adecuada me cambiaría. Fui un necio, lo creí, me casé. Ella conocía mi AMS, yo lo reprimía... pero era un desastre.

»Me costó muchos años, pero descubrí -y Dios me ayudó a descubrirlo- cuáles eran las causas de mi AMS y empecé un proceso de sanación profundo. Ya no lucho con la AMS, hace mucho que no la siento. Sigo viviendo con mi esposa, llevamos 30 años casados, somos muy felices y nuestros hijos ya han crecido. Estudié, soy terapeuta y en 25 años de terapia he ayudado a miles de hombres y mujeres. Querría que todas las personas con AMS que han sufrido así sean entendidas y ayudadas, querría que sean acogidas y estén cómodas en colegios, iglesias y en la sociedad.

»En mi primer libro hablo más de mi caso y de la terapia, más dirigido a los que sienten AMS. Este nuevo libro va dirigido a un público más amplio, a todo el mundo que conoce a alguien con AMS. En el primer capítulo hablo de por qué los activistas LGBT son tan fuertes en lo político, como lo consiguieron. En el segundo examinamos la evidencia: no se nace gay, es algo que se desarrolla. En el tercero analizo 5 autobiografías de homosexuales famosos, y planteo mis hipótesis de cómo se gestó su AMS por lo vivido en su infancia y adolescencia. Y en los otros capítulos explico qué podemos hacer con buenas palabras y comportamientos para amar a estas personas inteligentemente. Implantando mis estrategias, ¡creo que todas esas locuras políticas acabarán!


Cohen no quiso entrar a valorar las políticas de entrega de niños en adopción a parejas del mismo sexo, pero como terapeuta sí dijo que "los niños necesitan crecer experimentando la masculinidad y la feminidad en su familia; internalizar su propio sexo, sentirse reafirmados por el otro; así desarrollan una estructura psicosocial sana".

Desirée admitió que "lo ideal es lo ideal, pero en lo real sabemos que hay niños que carecen de padre o de madre, así que hay que paliar ese problema, intentar aportar mentores del sexo ausente, no sólo en parejas con AMS sino que puede ser bueno en padres viudos o solteros".


Desde el público preguntaron cómo reaccionar cuando un amigo o pariente te confiesa que tiene sentimientos homosexuales.

Cohen recomienda escuchar, escuchar y escucha; escuchar mucho, y hablar poco. Decir, si acaso, "gracias por contármelo, quiero saber más, cuéntame más: ¿cómo lo has sentido; qué puedo hacer por ti?" Y ofrecer amor incondicional.


Cohen distingue el "aceptar" del "aprobar" pero advierte que frases como "te quiero pero haces mal" o "te acepto pero no tu homosexualidad, tus actos" no ayudan a las personas con AMS, que las viven siempre como un ataque. ¿Cómo expresarnos, entonces? Cohen propone un diálogo así:

- Te amo y te acepto tal como eres.
- Ah, bien, ¿apruebas mi decisión, entonces?
- [Sonriendo mucho, mucho] ¡No!
- ¿Qué?
- Pero te amo y te acepto tal como eres.

»"Esto es una batalla de amor, no de convencer. Gana quien ama más y durante más tiempo. ¡Nunca hay que dejar de amar! Si se fijan, ¡eso es lo que Dios hace con nosotros!", apunta.


También dio algún consejo concreto, por ejemplo, en el caso de niños que juegan con muñecas, que parecen desarrollar demasiado interés por las cosas del otro sexo y no relacionarse con los de su sexo, especialmente con si padre. No tiene sentido que el padre le grite o le ridiculice a él y a sus muñecas, explica Cohen.

Es mejor que el padre entable amistad y buen trato con el niño allí donde él se encuentra, con las muñecas: hablar del pelo, del vestido, de lo que al niño le gusta. Una vez pasan los días o semanas y el niño ve que papá es fiable, cercano, acogedor, amigo y no amenazador, el padre puede ya invitarle a "cosas de chicos": deporte, excursiones, etc...


Cohen distinguió además entre la homosexualidad "situacional" (como la que pueda darse en entornos cerrados, internados, prisiones, etc...) con la AMS, que es algo fuertemente enraizado en la persona.

Los asistentes preguntaron si hay un aumento del número de adolescentes que se consideran lesbianas al haber más sexo precoz y más chicas dañadas en sus relaciones cada vez más precoces con chicos [más sobre esto, aquí]. Cohen no lo confirmó, pero señaló que los medios y el ambiente declaran que "experimentar" es algo glamouroso (Madonna con Britney Spears lo simbolizarían), aunque Cohen considera que ese experimentar es homosexualidad "situacional", no es AMS. Sí confirmó que buena parte del lesbianismo se genera en un temor a los hombres, a ser dañada por ellos. Recomendó sobre este tema el libro de Elaine Siegel "Choice Without Volition".


Hacia el final del acto, Álex Rosal expresó cuál sería el deseo de la editorial y de los autores. 

»Con el libro Comprender y sanar la homosexualidad, en estos 10 años, hemos llegado a muchas personas que se sentían muy mal con su AMS. Ahora nos gustaría tener un trato respetuoso con el otro sector, el que nos era muy hostil. No tenemos rencor por reacciones airadas que se hayan dado: viene de ese niño herido que todos tenemos dentro, y además, es verdad que aquí en España por lo general somos muy primarios y radicales al expresarnos. Queremos llegar a ellos, abrazarlos, decirles que les respetamos y romper los muros».

Por último, Desirée recomendó la web de la Fundación Internacional para la Sanación en español:
Corazonenmovimiento.com.mx