Creen que Dios era Adán, un hombre normal, y que gracias a su esfuerzo personal se convirtió en divinidad. Además, que tuvo relaciones sexuales con María y con ella concibió a Jesús, que tuvo varias mujeres como Marta y María Magdalena. Aseguran también en su Credo que la Biblia no es la única palabra revelada y que Jesús gobernará el mundo desde los Estados Unidos. Es la Iglesia mormona, y éstas son parte de sus creencias. Ahora han dado un paso más: después de años "peinando" calles y plazas de medio mundo de dos en dos, elegantemente vestidos y con una amplia sonrisa en la cara, los mormones cambian de técnicas. O mejor, amplían su variedad.
Los mormones han irrumpido en Facebook en los últimos días, con publicidades en la página de inicio y también en el muro personal de los registrados. Una inversión incuantificable de dinero y muy inteligentemente presentada.
La forma de presentarse genera ya curiosidad a quien está navegando en las redes sociales. El equipo de comunicación de la Iglesia mormona se ha esforzado por presentar una iglesia amigable y abierta, moderna y natural. Preguntas cómo "¿Son cristianos los mormones?", "¿Hay algún secreto? Descubra la verdad" o testimonios del tipo "Yo creo en la sustentabilidad, la naturaleza y la comida rica. Me llamo Max y soy mormón" o "Soy una amputada, conquistadora del miedo y maestra de lección. Soy Ingrid y soy mormona".
Son varios los anuncios y se pueden encontrar tanto en la home inicial de Facebook como en la propia página personal de cada usuario. Al pinchar, el navegador lleva a la sección de preguntas frecuentes de la página oficial de los mormones en España, pensada para darse a conocer al gran público. Preguntas como "¿Cómo puedo llegar a ser miembro de la Iglesia mormona?", "¿Cómo es el estilo de vida mormón?", "¿Es cierto que Jesucristo apareció en América después de su crucifixión y resurrección, de acuerdo con el Libro de Mormón?" o "¿Practican la poligamia?", la sección responde a decenas de preguntas, algunas de manera ciertamente ambigua precisamente por la polémica que pueden generar.
Por ejemplo, ante la pregunta "¿Por qué los mormones efectúan bautismos por los muertos?", la página web responde que "debido a que no todas las personas que han vivido sobre la tierra han tenido la oportunidad de ser bautizadas bajo la debida autoridad, se pueden efectuar bautismos vicarios, esto es, que una persona que esté viva puede ser bautizada a favor de una persona fallecida".
La Iglesia mormona realiza muchísimos bautismos por los difuntos cada año, recibiendo grandes sumas de dinero por ello, y además aprovecha para crear un gigantesco registro informático de los millones de difuntos «bautizados» de esa manera.
La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días fue fundada por José Smith en Estados Unidos en 1830. Cuenta él mismo que, cuando tenía 14 años, recibió una visión en la que se le advertía que no debía practicar ninguna religión porque Dios, por medio de él, quería restablecer el Evangelio auténtico, que ya no era realmente respetado por ninguna de las religiones existentes. Siete años después, se le apareció el ángel Moroni que le indicó dónde encontrar el Libro de Mormón. Pero el libro estaba escrito en un idioma ininteligible, mezcla de hebreo, griego y egipcio antiguos, lenguas que José Smith no podía entender. El problema fue resuelto de una manera prodigiosa: junto al libro se encontraban unas gafas milagrosas con las que pudo leer y traducir sin dificultad el libro. Hasta aquí la historia contada por él.
La realidad es que el Libro del Mormón está acusado de ser una copia de la novela de ficción bíblica escrita por Solomon Spaulding, cuya familia y herederos han litigado durante décadas bajo la acusación de fraude, contando incluso con el testimonio de peritos en caligrafía. Además, expertos en idiomas antiguos han examinado con detenimiento los caracteres que se publican en la historia escrita por José Smith y han declarado que no tiene que ver con el egipcio, el caldeo, asirio, árabe ni ninguna otra lengua oriental.
Después de todo esto, la "religión" mormona se expandió por todo el mundo y ha recibido acusaciones de poligamia, racismo, abusos sexuales, estafas económicas y fraudes históricos de diversa índole. Hoy son catorce millones de adeptos, según sus propias estadísticas, en las que aseguran no incluir a los muertos «bautizados» a posteriori. En 1835, José Smith profetizó el fin del mundo para 1891. De momento, aquí seguimos.