Una encuesta realizada en Reino Unido reveló que la mayoría de personas gay, lesbianas y transgénero de ese país no apoya el "matrimonio" homosexual, a pesar de la clara intención del Primer Ministro, David Cameron, por promover su legalización.

El estudio fue realizado por la consultora ComRes para CatholicVoices del 27 de abril al 20 de mayo de 2012, e indica que sólo una minoría de la población homosexual británica considera una prioridad la legalización del "matrimonio" gay, mientras que cerca de la mitad de los encuestados coincide en que la iniciativa de Cameron busca "hacer que su partido se vea más compasivo, más que por convicción".

En ese sentido, la encuesta revela que sólo el 27 por ciento de encuestados optaría por casarse si la ley británica se los permitiera, mientras que apenas el 39 por ciento cree que la redefinición del matrimonio es una prioridad para la población gay.

Austen Ivereigh, coordinador de CatholicVoices, dijo que "quizás ahora podemos tener el debate que deberíamos haber tenido hace mucho: acerca de si esto realmente es una cosa buena para la sociedad; si hay un caso convincente para el público, para una redefinición radical de una institución fundamental de la sociedad".

Por su parte, Colin Hart, director de campaña de la Coalición por el Matrimonio, señaló que "esta encuesta confirma una vez más que sólo un puñado de personas están presionado al Gobierno para redefinir el matrimonio. Incluso entre aquellos dentro de la comunidad gay, no hay una mayoría que piense que esto es una prioridad".

"El escepticismo de la comunidad gay sobre las razones del primer Ministro hacen eco de los puntos de vista en una población más amplia", indicó

Para Hart, "el Gobierno debería abandonar estas propuestas, que son profundamente antidemocráticas y que nunca han sido presentadas ante el público británico".