Según informa este sábado José Grau en ABC, la campaña de divultación del preservativo se denomina Por mil motivos y va dirigida a adolescentes de 14 a 16 años (3º y 4º de la ESO). Está promovida por las empresas Durex y Sidastudi, y por medio centenar de organizaciones, entre ellas Cogam (Colectivo de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales de Madrid).
 
El diario madrileño explica que ya están colaborando con esta iniciativa "de forma abierta" los Instituto de Enseñanza Secundaria (IES) Juan de Juni de Valladolid y Franciso Ayala de Madrid y el Colegio San Buenaventura de Llucmajor de Mallorca, "pero el proyecto se dirige a todos los centros de enseñanza del territorio nacional: públicos, concertados y privados", hasta un total de tres mil colegios.

La campaña aspira a "formar a los y las jóvenes para que puedan decidir de qué manera quieren vivir su sexualidad y capacitarlos/las en la gestión de los riesgos asociados (embarazos no planificados e infecciones de transmisión sexual) mediante la promoción del preservativo".

David Pancio, director de Sidastudi, que firma la carta, escribe: "En el material que ha recibido encontrará un díptico informativo con un preservativo de la marca Durex dirigido a los alumnos/as de 3.º y 4.º de la ESO que tiene como objetivo promocionar el uso del preservativo". La campaña incluye también una página web informativa dirigida a profesores, con material audiovisual y un concurso que otorgará un premio de 10.000 euros a dos de los institutos participantes.

"Cuando el colegio acepta, sin el consentimiento explícito de los padres, monitores de esas ONG, jóvenes de unos 25 años, imparten los cursos, en los que, entre otros asuntos, se les enseña a los chicos cómo se coloca el condón, a veces con ayuda de artilugios en forma de pene llamados elefante", afirma ABC.


Estos hechos han sido denunciados ante la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid por un grupo de padres.

En una carta fechada el pasado 23 de febrero, Alberto González Delgado, director del área territorial de Madrid Sur, dirigió una nota a todos los centros de educación de primaria y secundaria, en la que recordaba a los directores una recomendación del Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid a la vista "de las quejas recibidas en relación con el contenido de las actividades actividades complementarias de educación afectivo-sexual". Sin perjuicio de la autonomía organizativa de los centros, les advertía que era necesario "que los padres sean informados (de esos propósitos), antes de su celebración..., así como de los profesionales que los van a impartir, al objeto de que los padres puedan prestar el consentimiento expreso a la participación de sus hijos", concluye ABC.