No es demasiado frecuente que dos hermanas opten por la vida religiosa, aunque estos casos se daban mucho más en el pasado reciente y se siguen dando en alguna ocasión en la actualidad. Pero sí es cierto que es más extraño que sean precisamente dos gemelas las que compartan esta opción vocacional, y además en la misma orden. Pero si este hecho es ya extraordinario, lo supera el que ambas celebren juntas 70 años como monjas.
Este es el caso de las hermanas Mary Robert Bernet y Mary Clare Bernet, religiosas de las Hermanas de San Francisco de las Comunidades de Neumann, más conocidas como las franciscanas de Siracusa. Y toda su comunidad y la Archidiócesis de Nueva York lo han celebrado con ellas por todo lo alto.
Las hermanas Bernet, con el obispo Byrne, con el que ambas colaboraron décadas atrás cuando era sacerdote, durante la celebración de los 70 años de vida religiosa
Criadas en un orfanato en Staten Island
Las hermanas Bernet nacieron hace 89 años en Brooklyn con apenas 15 minutos de diferencia. Ambas se criaron en el orfanato Mount Loretto en Staten Island, lugar en el que conocieron esta orden religiosa de la que ambas se prendaron hasta acabar dando su vida en ella.
Tal y como relata Catholic New York, fue en primer lugar Mary Clare la que acabó dejando la escuela secundaria para ingresar en la congregación religiosa en enero de 1949. Mary Robert ingresó al enero siguiente, por lo que oficialmente su 70 aniversario se producirá en menos de dos meses.
Unas vidas dedicadas a la educación de niños y jóvenes
La emocionante celebración de estas hermanas vivió su culmen con la celebración de la Eucaristía presidida por el obispo auxiliar de Nueva York, Peter Byrne, en Peekskill, una pequeña localidad de este estado en cuyo convento residen ahora estas dos hermanas gemelas.
Ambas hermanas sirvieron en la educación desde principios de la década de 1950 hasta 2011 enseñando en la Arquidiócesis de Nueva York, incluidas escuelas en Staten Island, en el Bronx y Nueva Rochelle, así como en Nueva Jersey y Connecticut. Pero además, Mary Clare fue directora de novicias de la congregación durante dos décadas.
Con motivo de esta bella celebración, las hermanas gemelas han afirmado que al echar la vista atrás desde que hace siete décadas ingresaran en la vida religiosa "no cambiarían su vocación por nada". La Hermana Mary Clare confiesa que ambas “nos alegramos de que nos llamara Dios. Incluso, hemos podido vivir juntas a veces".
“La misa fue maravillosa y almorzamos después. Había alrededor de 150 personas. Fue un día muy especial”, dijo sobre la celebración que les habían preparado por este aniversario tan importante para ellas.
"Ellas aman a Dios, y aman a Jesús, y querían compartirlo"
Precisamente, Sor Mary Robert nació 15 minutos después de Sor Mary Clare. Nacieron justo entre cinco hermanos, cuatro niñas y un niño, y son en estos momentos las únicas supervivientes de su familia.
La hermana Mary Anne Maceda, OSF, que también reside en el convento en Peekskill, dijo que la celebración fue una fiesta. "Me alegro con ellas, comparto su alegría. Es todo un hito. Ellas aman a Dios, y aman a Jesús, y querían compartir eso en sus ministerios".
El obispo Byrne fue asistido por nueve concelebrantes. La homilía fue realizada por el padre Daniel Lanahan, OFM. De hecho, tanto el obispo como el padre Lanahan trabajaron con la Hermana Mary Clare y la Hermana Mary Robert hace décadas en el servicio a la Iglesia.
Ambas hermanas pudieron regresar ya como religiosas a Mount Loretto, el orfanato donde fueron criadas para ejercer como maestras, algo que nunca olvidarán y que les llevó de nuevo al inicio de su vocación religiosa allá en 1949.