El próximo domingo 30 de abril tendrá lugar la celebración de la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones -para suscitarlas con la oración- y la Jornada de las Vocaciones Nativas. Esta última es crucial para la expansión y el crecimiento de la Iglesia, pues en los territorios de misión, la vocación es muestra de que el Evangelio ha crecido gracias a la labor misionera, pero para una expansión y consolidación necesita de las propias vocaciones nativas: que los sacerdotes no provengan de otros países, sino que los sacerdotes ejerzan su sacerdocio en la tierra que conocen.
Jesús Torres, sacerdote misionero desde hace casi 40 años, lo explicó bien durante la presentación de la Jornada de Vocaciones Nativas: "Los misioneros debemos saber retirarnos y que se implante la Iglesia local".
Llegado a la diócesis de Beira (Mozambique) en 1985, quedó "fascinado" con lo que encontró y vivió durante los siguientes 27. "Una Iglesia viva a nivel de comunidades cristianas, que me evangelizó y a la que yo evangelicé, pero en la que no había vocaciones", explica. Concretamente, en ese momento había cuatro sacerdotes en su diócesis. Tres sin contar con el obispo.
Conforme pasaron los días, semanas y meses, Torres tomó conciencia de que de seguir así, esas comunidades vivas y numerosas "se iban a secar", de que la Iglesia "tenía que crecer". Algo imposible de lograr a base de misioneros europeos o al margen de las vocaciones de los propios mozambiqueños.
"La primera evangelización se trata de hacer nacer la Iglesia, y para esto estamos nosotros. Pero una vez implantada, tiene que crecer, y eso solo se puede hacer a través de las vocaciones nativas. Es el único camino, no hay otra manera de la Iglesia crezca en los territorios de misión", subraya.
Prácticamente al mismo tiempo que le surgió está inquietud, Mozambique reabrió sus seminarios y el obispo le pidió ayuda como profesor para formar a los nuevos seminaristas.
"Se me abrió la mente para ver cómo hacer crecer a la Iglesia. Empezamos a trabajar, visitábamos los poblados más alejados del campo que se habían mantenido sin sacerdotes y las vocaciones nativas comenzaron a nacer", recuerda. Los siguientes 13 años fue el rector del seminario de su diócesis.
El misionero Jesús Torres y el mozambiqueño Jorge Pinho protagonizan el vídeo de la Jornada de las Vocaciones Nativas de 2023.
De cuatro sacerdotes a cien: "Mi mayor orgullo"
Y los frutos comenzaron a hacerse visibles, lenta pero firmemente. Hoy, tras casi 40 años de su primera misión en su diócesis de Mozambique y habiendo puesto los pilares para fomentar las vocaciones nativas, un centenar de sacerdotes ejercen su ministerio y constituyen su "mayor orgullo". Ejemplo de ello es Jorge Pinho, que acompañaba al mismo Torres cuando era misionero y después quiso hacerse sacerdote gracias a su ejemplo.
El caso de Pinho es solo una muestra de que "la etapa misionera en Mozambique ya pasó", de modo que las vocaciones actuales del país no solo son nativas, sino también jóvenes. Por eso, en cierta manera, aunque España no sea propiamente tierra de misión, Torres lamenta ciertas desventajas de la Iglesia española respecto a la de Mozambique, "envejecida y con falta de vocaciones".
A la necesidad de la oración por las vocaciones nativas, Torres añade la importancia de la colaboración económica para impulsar a la Iglesia en los territorios de misión, que actualmente coordina la Obra de San Pedro Apóstol.
Puedes colaborar con las vocaciones nativas en su jornada a través de un donativo puntual o mediante una beca de estudios para formar nuevos seminaristas, mediante bizum (donando al 00500), desde su página web o por transferencia.
España, líder en generosidad
El seminario mayor de Beira es uno de 711 seminarios diocesanos que hay en las misiones. Para ayudarles a todos, el Papa Francisco tiene una herramienta: la Obra de San Pedro Apóstol, que nació precisamente con el fin de que ninguna vocación nativa se perdiera por falta de medios. Con estas ayudas se cubren gastos ordinarios y se apoyan necesidades extraordinarias. Además se apoya a los formadores y a los novicios de congregaciones locales que no tienen otros apoyos internacionales.
José María Calderón, director de OMP en España, ha agradecido a los españoles su generosidad con esta Obra, que ha llevado a nuestro país al primer puesto del podio: el año pasado se enviaron 1.977.274,82 € a 92 seminarios. Y esta generosidad se ha mantenido a lo largo de los años de la pandemia, cosa que no ha sido igual en otros países.
Con la crisis del COVID-19 las necesidades en los seminarios han aumentado considerablemente, pero en muchos países las colectas han disminuido. Por eso, Calderón ha hecho un llamamiento a la generosidad este domingo 30 de abril con la oración y los donativos -a través de las colectas, becas de estudio, estipendios de Misa o donativos puntuales (toda la información en www.vocacionesnativas.es)-.
Francisco: "Alegría, vocación y simpatía" en las misiones
Precisamente este mismo miércoles, el Papa Francisco emitió su mensaje dedicado a la sexagésima Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones que se celebra el próximo domingo domingo.
En el mismo, Francisco recordó la importancia de considerar la misión con sus múltiples características, que resumió en "don y tarea, fuente de vida nueva y de alegría verdadera". Asimismo, llamó a que las iniciativas de oración y animación vinculadas a esta Jornada refuercen "la sensibilidad vocacional" en "las familias, en las comunidades parroquiales y en las de vida consagrada, en las asociaciones y en los movimientos eclesiales".
"Que el Espíritu del Señor resucitado nos quite la apatía y nos conceda simpatía y empatía, para vivir cada día regenerados como hijos del Dios Amor y ser también nosotros fecundos en el amor; capaces de llevar vida a todas partes, especialmente donde hay exclusión y explotación, indigencia y muerte. Para que se dilaten los espacios del amor y Dios reine cada vez más en este mundo", concluyó Francisco en su mensaje.