El próximo 21 de junio será ordenado sacerdote a sus 50 años Drake McCalister, un expredicador pentecostal, casado y padre de cinco y que durante estos últimos años había sido diácono. Esta familia se convirtió gracias a los contenidos de la televisión católica EWTN, fundada por la Madre Angélica y que es a día de hoy la más importante en el orbe católico.

Este diácono ha recibido una dispensa por parte del obispo de Steubenville para ser ordenado sacerdote. En una entrevista con Catholic News Agency y que recoge Aciprensa, McCalister cuenta que hace 20 años era un joven pentecostal que sintió la llamada para ser predicador. Se casó, tuvo hijos, y consiguió el título de Teología y así empezó este ministerio.

Conoció el catolicismo a través de una televisión

Pero en 1999 se sintió atraído por la Iglesia Católica gracias a un programa de EWTN. “Mi conversión comenzó a través de EWTN, esa era mi fuente de información principal de la Iglesia Católica, realmente no conocía a ningún católico No estaba de acuerdo con toda la teología, pero los dos presentadores eran caritativos, evangelizadores, estaban centrados en Cristo, conocían su Biblia. Nunca me había encontrado con un católico que tuviera todas esas cualidades”.

Sin embargo, cuanto más escuchaba más atraído se sentía por la Iglesia Católica. “Comencé a hacer mi propia investigación, leyendo documentos de la Iglesia, de Padres de la Iglesia y escritos de los Papas y los Santos. Me interesaba menos lo que la gente tenía que decir sobre el catolicismo que lo que el catolicismo decía de sí mismo en los documentos oficiales y en la historia de la Iglesia”.

Tras varios años investigando el mundo católico, toda la familia decidió bautizarse en 2004. Poco después estudio un posgrado en Teología y Catequesis en la muy católica Universidad de Steubenville, donde ahora es coordinador de prácticas catequéticas.

En 2010 Drake se planteó la posibilidad de ser sacerdote e inició el programa de diácono permanente. “Quiero servir a la gente de mi parroquia, así que cuando se presentó el diaconado, me presenté. Pensé: ‘Esto es genial, puedo hacer esto como un hombre casado’”.

Una invitación a ir más allá

Sin embargo, afirmó que el Espíritu Santo lo llamaba a hacer algo más: “Me incitaba a decir que necesitaba hacer la pregunta si calificaba para la dispensa del requisito de celibato y acceder al sacerdocio”.

Posteriormente, cuando su obispo confirmó que una dispensa podría ser posible en su caso, comenzó a considerar el sacerdocio más seriamente y le aseguró al director de su programa de diaconado que su “único deseo es ser obediente a Jesucristo”.

“Es por eso que dejé todo, desde mi origen denominacional, para ingresar a la Iglesia Católica, fue mi amor por Jesucristo, y el Señor está abriendo esta puerta y poniendo esto en mi corazón. No necesito ser un sacerdote como si estuviera cumpliendo con algún tipo de deseo personal, mi deseo es simplemente ser obediente”, cuenta Drake.

"Estoy aquí para servir"

Durante el proceso, mientras recibía el permiso de la Santa Sede, oraba y discernía, pasaron aproximadamente 10 años de preparación para ser ordenado. “Hay una manera en que veo la vida y el ministerio y la Iglesia que es diferente, porque tuve que luchar con diferentes cosas para entrar en la Iglesia. Una de las formas en que se diferencia es mi deseo de evangelizar y de alcanzar a las personas en las periferias”, explica.

En cuanto a estar casado, no está seguro del impacto que tendrá en su ministerio, pero planea aprovechar la vida familiar en sus homilías. Es algo inusual que los sacerdotes católicos latinos estén casados, dijo, aunque observó que otros ritos en la Iglesia Católica lo permiten bajo determinadas circunstancias.

“No soy un activista. Es decir, no estoy aquí para abogar por el fin del celibato en el sacerdocio, cualquiera que busque subirse a ese carro deberá buscar en otra parte. Estoy aquí para servir a Cristo y guiar a la gente a Jesús”, afirmó.