Frank Cronin es un docente, periodista y escritor que publica a menudo en la prensa católica norteamericana como F.X.Cronin. Antes de ser católico, fue agnóstico y protestante pentecostal.
"Crecí en una familia católica y fui a colegios católicos. Después de mi primer año de universidad, con 19 años, llegué a la conclusión de que la Iglesia y eso de Dios era un cuento de hadas. Yo no fui un ateo endurecido, pero sí agnóstico, un ateo tácito, y así me mantuve hasta los treinta y pico años", explica en una entrevista en CHNetwork.
Hoy, después de muchos años trabajando con adolescentes, considera que si en su adolescencia le hubieran dado una formación religiosa bien argumentada, con apologética y razones serias para la fe, se habría mantenido católico. Pero nadie le ofreció eso.
Durante años, no tuvo ningún interés por las cosas religiosas. "Nadie hablaba de esas cosas, se consideraba pasado de moda y no formaba parte de la vida", resume. Cuando algún cristiano, por lo general protestante, le intentaba hablar de la Biblia y citar versículos él respondía con burlas. "Nunca me dijeron nada que fuera remotamente persuasivo", detalla.
Una novia alejada de la iglesia, pero...
Después conoció a su la que sería su esposa. Ella había recibido los sacramentos de niña en una iglesia ortodoxa: bautismo y confirmación a la vez. Después su familia se mudó, y durante un tiempo fueron a una iglesia católica. Pero su experiencia fue mala, por culpa de sacerdotes violentos y agresivos.
Durante el noviazgo, Frank no veía a su novia interesada en cosas religiosas, aunque entendía que ella creía a su manera. Pero diez días antes de casarse, ella quedó transformada: había tenido una experiencia del Espíritu Santo, de "nacer de nuevo", y pasó a ser una cristiana renacida, como se llaman en entornos evangélicos.
Incluso en la luna de miel Frank se sintió amenazado por esa nueva espiritualidad fervorosa y se lo dijo a ella: "oye, si sigues así, en 6 meses me voy".
Con todo, pudieron empezar a hablar sobre la fe. Durante un año o dos, él se mostró como un oyente hostil. "¿Cómo sabes que lo que crees es real?", preguntaba él. "Simplemente, lo sé, es así", decía ella. Pero no daba argumentos y Frank quería razonamientos. Por otra parte, se daba cuenta de que estar enamorado, amarla a ella, también era algo que 'se sabe', algo previo a ser argumentado.
La historia de Frank Cronin en una versión breve de 6 minutos (en inglés).
Libros de C.S.Lewis para pensar
Decidió darle una oportunidad teórica a Dios. Pasó un fase de vago deísmo. Su madre le prestó libros de C.S.Lewis como Mero Cristianismo y El Problema del Dolor, que le hicieron pensar. Ahí sí había argumentos. Y después de reflexionar 3 años llegó a declararse monoteísta.
A continuación, tocaba examinar el caso de Jesucristo y sus "afirmaciones bastante escandalosas". "Que Dios se hizo ser humano, y caminó por el planeta... Claro, si uno dice que Jesús es un buen maestro, pero ve que Jesús dice cosas como 'Yo soy la Verdad'..." Necesitó otros tres años para aceptar la enseñanza plena de Jesús.
Experiencias del Espíritu Santo
En 1988 también él tuvo una experiencia de efusión del Espíritu Santo, o de nacer de nuevo, y así se hizo cristiano pentecostal hasta 2007. Como pentecostal, sentía experiencias de gozo y acción del Espíritu Santo con frecuencia.
Cronin señala que el itinerario puede ser distinto para distintos cristianos. "Para mi mujer, primero fue la experiencia, lo místico, y después fue aprendiendo el razonamiento, lo intelectual. En mi caso fue al revés, primero el camino intelectual, y después la experiencia".
En esos años estudió Teología en Regent University, una universidad protestante. A sus hijas las educaba en casa, en régimen de homeschooling. Le gustaba su iglesia, tenía buenos pastores, trabajaba con jóvenes de la congregación, aprendía sobre ser padre... Después estudió Docencia en Harvard.
Roma Dulce Hogar: el 'Sola Scriptura' protestante colapsa
Durante un tiempo tuvo una secretaria católica. "Frank, eres más católico que los católicos", le decía ella, medio en broma. Hasta el día en que ella le regaló el libro de Scott Hahn Roma Dulce Hogar, el testimonio de conversión al catolicismo de este biblista presbiteriano. Se lo leyó un verano, durante unos días que su esposa y sus hijas no estaban en casa.
Le impactó el argumento de Scott Hahn contra el dogma central del protestantismo, Sola Scriptura. "Si la Escritura no dice 'sólo la Escritura' tú no puedes decir 'sólo' simplemente por tu propia definición", explica.
Y, efectivamente, la Biblia enseña que la Escritura es guía de fe y de vida, pero no dice "sólo la Escritura". Era una contradicción "devastadora". De hecho, la Escritura enseña que la Iglesia es "el pilar y fundamento de la verdad" (1 Tim 3,15).
"Yo tenía la idea tácita de que Dios es lógico, de que no hará contradicciones lógicas, y me releí 10 veces ese párrafo y lo comenté con mi hija de 16 años durante una hora y media, y ella me decía: 'papá, no quiero ser católica'".
Ahí empezó Frank a estudiar Historia de la Iglesia y los argumentos católicos. Vio que la idea que suelen repetir los protestantes de que la Reforma en el s.XVI era una vuelta al cristianismo antiguo no se sostenía. También vio que hasta finales del s.IV no había una lista con autoridad de libros que forman parte de la Biblia: es la Iglesia la que reconoce con autoridad qué libros son Escritura.
El retorno a la Iglesia Católica, siguiendo la Verdad
Tras 10 meses de investigación, entendió que la Iglesia que fundó Cristo y mantenía su enseñanza completa es la Iglesia Católica. Así, volvió a la Iglesia en la que había sido bautizado, "no por la gente o la institución, sino por la doctrina, siguiendo la Verdad".
Hoy, como católico, dice que a menudo se emociona en misa cuando sube a proclamar las lecturas. Siente una profunda reverencia en el momento de comulgar a nivel emocional, mental y de entendimiento. Y todo lo que aprendió en su viaje espiritual, le sirve para intentar comunicar la verdad del Evangelio.
F.X.Cronin en una entrevista larga en CHNetwork cuenta su viaje hacia el catolicismo (en inglés).
Artículo de hemeroteca publicado originalmente el diez de junio de 2021.