»Fui bautizada en la noche de Pascua de 2012. Hasta hace unos años, no sabía quiénes eran los católicos. Había oído hablar de ellos, pero no conocia a ninguno.
»Colaborando brevemente con el Kuangchi Program Service conocí a los primeros misioneros de mi vida: el padre Jerry y el padre Bob. Bob era un americano en una silla de ruedas, su historia me interesó. Estaba muy sereno a pesar de su situación. Me preguntaba si la fe cristiana tenía que ver con su apertura a la vida. Estas preguntas giraban en mi cabeza, junto con muchos otras.
Yinhui Chen es católica desde 2012;
le gusta el trabajo con presos
y aprender más de la fe
»Abrí la compañía de medios de promoción, marketing y comercialización. Me sentía satisfecha personalmente, pero algo me faltaba. Y después de una formación de unos meses, le pedí ser bautizada.
»Creo que fue más bien por curiosidad por los relatos de los misioneros, no sólo los hombres, sino también especialmente algunas monjas que tenían una vida interior muy profunda, y cuyo servicio a los más desfavorecidos me llamó la atención en modo particular.
»Mi amigo católico me invitó a asistir a catequesis en la Parroquia de la Sagrada Familia. También el párroco me acompaño mucho tiempo y con paciencia. Fueron ocho meses de catecismo. Entonces fui bautizada en la noche de Pascua.
»Algunos me preguntaron si no era un "poco temprano, pero otros me han dicho que si quieres aprender a nadar realmente tiene que echarte al agua, y si realmente quieres saber la vida de fe, lo mejor es entrar en la comunidad y tratar de nadar. Sin experiencia no se puede entender realmente la vida cristiana.
»En la Universidad Nacional de Taiwán obtuve una licenciatura en Negocios Internacionales en 1998. Yo no sabía por qué había elegido esto, disfrutaba durante los años universitarios. También hice un período de servicio civil con los presos, que continúa hoy en la madurez cada semana. Todos los sábados iba a dar lecciones y organizaba actividades sociales y formativas.
»Mi comunidad cristiana, mi grupo de estudio bíblico, incluye a 15 personas. Compartimos mucho.
»Mis páginas favoritas del evangelio son aquellas en las que Pedro conversa con Jesús. Aunque a menudo Pedro no entendía mucho, me gusta porque es sincero y generoso.
»Ayudar a los demás, para mí es sin duda la mayor pasión. Dado que todavía tengo mucha energía, quiero utilizarlos para testimoniar la generosidad de Dios.
»Me interesan mucho los presos. Un teólogo que me atrae por su manera de hacer actual el mensaje del Evangelio es el Padre Jesús Muñoz que tiene un estilo particular que encaja con mis intereses y mis necesidades. Además no tiene miedo de recibir consultas simples o estúpidas: todo para él es importante.
»Las mujeres de la comunidad cristiana son muchas, pero las vocaciones al sacerdocio han bajado ligeramente. La Iglesia debe mejorar la comunicación con las jóvenes generaciones. A menudo usamos un lenguaje limitado a protestar y bloquear en lugar de ser más constructivo y valiente en la comprensión de las diferentes posiciones. Me gustaría tener más debate, está en mi carácter. Pero, básicamente, estoy en buena compañía, porque a partir de lo que leo y oigo incluso a Francisco decir: "¿Quién soy yo para juzgar?". Y de hecho, en la comunidad cristiana, gracias al Espíritu Santo, hay un legítimo pluralismo de posiciones.