Mamela Fiallo es una enérgica defensora de los derechos humanos reconocida a nivel internacional desde su originalidad femenina pero no feminista.
Ecuatoriana, cursó la primaria en Estados Unidos, la secundaria en Ecuador y la universidad en Argentina. Es profesora universitaria de Lengua e Intérprete de Conferencias con diplomado en Economía de Mercado aplicado a la Doctrina Social de la Iglesia. También es periodista y conferencista internacional.
Inició su activismo provida desde su cuenta personal de Facebook durante el confinamiento de COVID-19 cuando el mundo se volcó al espacio digital. Luego lo expandió a Instagram, Youtube y hoy Twitter es su plataforma principal para esta militancia. En 2021 comenzó a participar como conferencista en seminarios provida en países como México, Argentina, Uruguay, Ecuador, Guatemala y en Perú, donde fue reconocida por parte del Congreso.
Cuando nadie se atreve
"Tenemos el deber de una lucha activa. Está inscrito en el Catecismo de la Iglesia Católica, todo católico está llamado a traer el Reino Social de Cristo a la Tierra y eso exige formación. Si supiéramos que es un mandato tendríamos mayor compromiso; olvidar la oración a San Miguel Arcángel a nivel litúrgico también nos ha hecho olvidar ese compromiso a la lucha y a su protección", señala Mamela.
"La batalla cultural no es más que otro frente dentro de la guerra espiritual entre el bien y el mal. El bien y el mal existen. El bien merece ser defendido y el mal combatido, si bien queremos que el mal se castigue, hay que hacerlo humanamente. Con la humildad de sabernos pecadores y con el compromiso de salvar al que hace el mal trayéndolo hacia el bien", añade.
Mamela junto a la actual vicepresidente argentina y activista provida Victoria Villarruel.
"Yo invito a ser como niños. Los niños dicen la verdad, a los niños no les importa decir 'el emperador está desnudo'. La valentía de decir la verdad cuando nadie se atreve es lo que genera reacción en la gente. Como decía San Agustín, la verdad es como un león, la sueltas y se defiende sola", expresa Mamela.
Amenazas y agresiones
Su labor defendiendo la dignidad humana y la libertad religiosa le ha traído agresiones físicas y sexuales. Incluso tuvo que dejar su país por temor a graves amenazas de muerte. Agredida sexualmente en diciembre de 2019, exigió una disculpa pública del agresor y no la obtuvo debido al movimiento feminista que hizo un llamado público a censurar a Mamela encubriendo al agresor. Y azotada públicamente por feministas en 2020, Mamela afirma que estos ataques a su persona han fortalecido su fe.
"Cuando conoces la vida de los mártires, cuando conoces que hay gente que murió por la fe, afirma el compromiso de vivir tu fe. Yo no vivo una vida de fe porque se me ha manifestado buenamente, sino porque he visto al mal de frente", afirma.
Hoy Mamela intenta vivir más su fe, sin embargo no siempre fue así.
La causa provida le llevó al catolicismo
"No fue la fe lo que me llevó a la causa provida, sino que fue la causa provida la que me llevó a la fe. Al inicio, la causa provida fue un tema meramente político para mí, pero fue en ese camino donde me encontré con Dios, viviendo una vida más cristiana", explica.
"Fue desde la caridad que empezó mi apostolado. Me di cuenta de que ¡no hay asociación atea por los descalzos! Con mis amigos protestantes iba a hospitales infantiles y orfanatos y con mis amigos católicos alimentábamos a gente en la calle y acompañábamos a mujeres con síndrome postaborto", recuerda.
"Nunca fui atea pero no era católica practicante a pesar de haber sido bautizada con agua del Río Jordán por el arzobispo en su capilla personal", comparte.
Aquí puedes ver uno de los vídeos que comparte Mamela en su canal.
"Para mi labor, el ser católica y ser mujer, partiendo de la premisa de que la Iglesia es Madre y Maestra, me hace sentir muy representada", concluye Mamela Fiallo.