Nate Kuhlman y Mariana García se casaron el 28 de octubre de 2023 y partieron en luna de miel a la isla caribeña de Santa Lucía. Allí, tres días después, en un accidente de esquí acuático, Nate perdió la vida.

Formaban una pareja católica joven, apenas superados los veinte años. Ambos estudiaban en la Universidad Franciscana de Steubenville (Ohio), uno de los  grandes centros católicos de enseñanza superior en Estados Unidos. Allí se habían conocido en octubre de 2021, y desde que empezaron a salir rezaban juntos todas las noches. En diciembre de 2022 se comprometieron y para guardar la virtud cristiana de la castidad, ambos habían decidido no mantener relaciones íntimas hasta el día de la boda.

Tras la trágica muerte de Nate, se hizo una colecta on line entre familiares y amigos para sufragar los gastos del rápido retorno del cadáver. Al agradecer la generosidad de los donantes, el padre de Nate, Gordon, hablaba de él como alguien cuya permanente alegría "te hacía sentirte conocido y amado por el Padre Celestial a través suyo". Al compartir, por deseo de Mariana, el vídeo de la boda de ambos -que el joven no llegó a ver-, añadía que había sido un regalo "recordar el rostro de Nathaniel solo unos días antes de correr en brazos de Jesús".

La madre de Nate, Heather, compartió en sus redes sociales que la muerte de su hijo les había dejado sin respiración: "Pero, por la gracia de Dios, estamos bien. Es duro y doloroso, pero todos avanzamos un paso cada día hacia ese mismo momento".

El regalo de Dios

El Día de Acción de Gracias, que en 2023 cayó el 23 de noviembre, Mariana supo que estaba embarazada. Y el 18 de julio, al cumplirse nueve meses de estos acontecimientos, Mariana anunció la buena nueva del nacimiento del hijo de ambos, Raphael Patrick Kuhlman: "Claramente, Dios tenía un plan mayor que el que cualquiera de nosotros hubiéramos podido imaginar", escribió entonces, comentando un embarazo tan singular.

Finalmente, la joven madre compartió en sus redes algunas imágenes del recién nacido que recoge el New York Post:

Mariana, con el pequeño Raphael. Foto: Facebook Mariana Kuhlman.

Cuando Nate murió, la familia pidió oraciones para sostenerles en un momento tan difícil de superar. "Dios respondió a nuestras oraciones, y a tantas oraciones en todo el mundo, solo que en una forma diferente a la esperada", comentó Mariana: "Con el regalo de la vida, con este milagro que nos llena de alegría compartir con todos vosotros".