Este 9 de agosto se cumplen 101 años del nacimiento del beato Manuel Lozano Garrido, “Lolo”, patrón de los periodistas e incansable transmisor del Evangelio pese a una parálisis que le dejó paralítico durante 28 años y una ceguera que le acompañó en el final de su vida.
Con ocasión de fin del centenario de su nacimiento, la asociación Amigos de Lolo ha querido celebrar su 101 cumpleaños con un mosaico en el que “amigos” de lolo y diversas personalidades de la Iglesia y del periodismo católico componen una de sus imágenes más representativas.
Desde el Papa Francisco y sus sucesores –San Juan Pablo II o Benedicto XVI–, pasando por Monseñor Amato –Prefecto de la congregación para las Causas de los Santos en 2010–o Monseñor del Río son algunas de las autoridades eclesiásticas presentes en la imagen.
También están presentes multitud de medios de comunicación (Aleteia, Alfa&Ω, Canal Sur, EcclesiaDigital.com, OMP, Radio María, ReligiónEnLibertad.com, Trece y Vatican News) y periodistas como Álex Rosal, Álvaro de Juana, Ana Medina, Antonio Agudo, Antonio Gil, Antonio Moreno, Asier Solana, Eleuterio Fernández, Encarni Llamas.
El Mosaico del beato Lolo, que puedes descargar aquí en alta definición.
Para este periodista, Acción Católica y la Eucaristía lo eran todo
Nacido en 1920, a los 22 años comenzó a sufrir los síntomas de una parálisis progresiva que pronto degeneraría en una inmovilidad total. Su dolencia no le impidió ser uno de los jóvenes más entregados a la Acción Católica, que para él “lo era todo”.
Allí cosechó un fervor eucarístico “que le marcó para toda la vida” y que le llevó a no temer las amenazas durante la II República española debido a la fe. Tanto era su amor por la Eucaristía que en 1937, con 17 años, fue arrestado por repartir clandestinamente la comunión.
Concluida la Guerra, cuando su inmovilidad comenzó a ser definitiva, decidió dedicarse al periodismo y la escritura, llevando su nueva profesión en compañía de su fe hasta las últimas consecuencias.
Escribió el “Decálogo del periodista” y “La oración por los periodistas”. Cuando ni sus piernas ni sus manos le permitían continuar su labor de evangelización con la pluma, siguió redactando mediante el dictado a un magnetófono desde su silla de ruedas. Junto a ella, fundó los grupos de oración por la prensa, compuestos por 12 enfermos que “adoptaban” espiritualmente un medio de comunicación, al mismo tiempo que estrechaban los lazos entre ellos gracias a la publicación mesual fundada por el beato, “Sinaí”.
Conferencia de María Solano sobre Manuel Lozano, autora de la única tesis doctoral sobre el beato Lolo.