Este sábado falleció en Madrid el periodista venezolano José Manuel Dopazo, de 47 años, como consecuencia de las complicaciones de un ictus padecido hace ocho meses. Casado y padre de un hijo, llevaba años afincado en España, donde era director de La Contra TV y entrañable y generoso colaborador de Religión en Libertad.
Periodista vocacional y estrella de la televisión
La noticia ha conmocionado al mundo de la comunicación en Venezuela. José Manuel Dopazo era allí uno de los rostos más conocidos y queridos de la pequeña pantalla. Trabajó en Venevisión entre 2004 y 2016, primero como reportero y luego como presentador de los informativos en el prime time. Dirigió asimismo en 2007 el programa Encuentro con los Estudiantes, por el cual ganó al año siguiente el Premio Nacional de Periodismo en 2008. Gracias a su inconfundible voz, triunfó también en la radio con el programa Maravillosa Venezuela.
Fue reconocido como Periodista del Año por los Premios Tacarigua de Oro, que valoran lo mejor de los medios y el espectáculo en el país, y en 2015 recibió el Premio Balancín de Oro por su labor al frente del Noticiero Venevisión.
La carrera periodística de Dopazo fue todo un descubrimiento vocacional, porque su intención era estudiar Arquitectura y empezó a trabajar en los medios para pagarse los estudios: "Pero a la larga la vocación de comunicador pudo más que la de arquitecto", confesó en una entrevista de 2011, y finalmente se graduó en Comunicación Social en la Universidad del Zulia, en su Maracaibo natal.
Los medios venezolanos han dado cuenta de su muerte con el sincero y hondo pesar de todos sus compañeros. Endrina Yépez, de Venevisión, le destacó como “gran compañero y amigo“, y su muerte como “un duro golpe al corazón”. El comunicador Manuel Sainz se refirió a él como un hombre “noble, generoso y discreto” en quien vio a un hermano durante años. La periodista Alba Cecilia Mujica lo describió como un profesional serio y responsable, “hermoso por fuera y por dentro”. Y la comunicadora Moraima Gutiérrez Ferrer comentó que lo recordará como “un hombre equilibrado, solidario, decente, servicial”.
La opinión de José Manuel Dopazo era muy valorada y requerida. Así enjuiciaba hace dos años la situación política en España, alertando de su deriva hacia el chavismo.
Todas esas cualidades brillaron también durante su trabajo en Madrid. A su llegada a España se puso al frente de La Contra TV en la segunda etapa del canal, reforzándolo con su extraordinario bagaje de experiencia profesional y amor por las cosas bien hechas.
Un buen cristiano
Colaboró asiduamente con Religión en Libertad, prestando su valioso consejo y su ayuda certera en distintas iniciativas de corte audiovisual. Su paso por la redacción de ReL ha dejado momentos imborrables de cercanía personal, que se traducen ahora en un dolor devastador por su pérdida.
Su colaborador en La Contra TV, Poli Sanchiz, dejó en su cuenta de Twitter un significativo recuerdo de Dopazo: "Ayer falleció uno de mis maestros en el oficio del periodismo, José Manuel Dopazo. Él dejó su puesto de presentador en Venezuela, donde tenía decenas de miles de espectadores, para huir de la censura chavista. Una vez le pregunté si no echaba de menos esa fama. Él me dijo que prefería decir la verdad ante unas pocas personas que decir mentiras frente a millones, por mucha fama que eso trajera. Siempre recordaré su ejemplo, sus consejos y su valentía. DEP".
José Manuel Dopazo era una persona muy religiosa, gran devoto de la Virgen. Aceptó con entereza cristiana y confianza en la voluntad de Dios el duro proceso que se inició con el ictus, en otoño de 2020, que con diversos altibajos durante la recuperación ha terminado llevándole a la muerte. Agradecía todo lo que se rezaba por él: "Las oraciones me han mantenido lúcido y de pie y con fuerza. No hay más que darle gracias a Dios y seguir adelante", decía.
ReL pide a sus lectores que encomienden el alma de este gran católico, profesional y amigo.