Como ha contado en una entrevista reciente, Roland Joffé aceptó dirigir "There Be Dragons" por la respuesta que da san Josemaría: la respuesta a una chica judía que quería convertirse y sus padres no le dejaban, y quería saber cómo debía actuar. Mientras oía ese diálogo en el reproductor de su DVD, Joffé estaba escribiendo una carta a los promotores del filme para decirles que se olvidaran de él. Pero, de repente, la respuesta de Escrivá le dejó conmocionado y cambió la idea. Así lo explica en la entrevista.
“¡Qué momento maravilloso! Qué momento maravilloso, inesperado, y sobre todo viniendo de una organización de la que todo el mundo se esperaría que dijera lo contrario”. Estaba mirando a mi ordenador y me decía: “Espera un momento”. Apagué el DVD. Dejé de escribir la carta. Me puse la gorra de director de cine y escribí una escena en la que Josemaría aparece con un hombre, a punto de morir, a quien ya conocía, que le dice que es judío y que su sueño es convertirse.
Escribí la escena de cabo a rabo, sin dejar de pensar: “Tengo realmente ganas de ver esto en una película. Pero, no lo veré nunca si no hago la película, ¿verdad? ¿O enmarcaré esta escena en otra película?”.
En lugar de la primera carta que me disponía a redactar, escribí: “Querido X, estoy verdaderamente interesado en este proyecto, a condición de disponer de toda la libertad de creación para hacerlo como quiero, y que usted no cuente conmigo para seguir una línea de parte, y si usted acepta el hecho de que no soy muy brillante y que lo haré lo mejor posible, pero que tengo que seguir mi propia verdad. Si usted está de acuerdo, me gustaría hacer verdaderamente este proyecto”.