Como ya es tradicional durante los viajes internacionales del Papal, uno de los momentos de mayor interés y que más titulares dejan en los medios de comunicación es la rueda de prensa improvisada que se produce en el avión de regreso a Roma. En ella los periodistas y el Papa hablan de manera informal y volviendo de Egipto Francisco habló de la situación política de Egipto, Venezuela, Trump o los populismos, así como alguna anécdota.
Preguntado por si le hubiera gustado ver las pirámides, Francisco confesó que “hoy mis dos asistentes se han levantado a las seis para ir a verlas…Sí, me hubiera gustado poder verlas”.
Ya centrado en Egipto habló sobre si su discurso ha legitimado el gobierno de Al Sisi en Egipto. Francisco aclaró que él habla de valores, “defender la paz, la armonía, la igualdad entre ciudadanos de cualquier religión. Son valores. Yo he hablado de valores”.
Por ello, aclaró que “si un gobernante defiende uno u otro (valor), es otro problema. He hecho 18 viajes internacionales. Muchos dicen: ‘¿por qué habla con este…? Si habla con este signfica que apoya a ese gobierno…’. Todos los gobiernos tienen sus debilidades o sus adversarios políticos. Unos dicen una cosa y otros otra. Yo no me mezclo, hablo de valores y que cada uno vea y juzgue si este gobierno o este Estado los vive o no”.
Igualmente, respondió sobre si reuniría con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. “La Secretaría de Estado no me ha dicho si el presidente la ha solicitado. Pero yo recibo a todos los jefes de Estado que solicitan un encuentro”, se limitó a responder el Papa.
Otra de las preguntas trató sobre la tensión internacional que se está viviendo en estos momentos en Corea del Norte, con amenazas de ataques y respuestas entre países. “Yo llamo a los líderes, y les llamaré, como llamé a otros líderes de otros lugares en el pasado a resolver los problemas por la vía diplomática. Existen facilitadores, mediadores; hay países que se ofrecen, como Noruega, que está siempre dispuesta a ayudar, por mencionar un ejemplo”.
En opinión del Papa, “el camino es la negociación, la solución diplomática. Esta guerra mundial a trozos, se ha concentrado en puntos donde ya había tensión. Esto de los misiles de Corea ocurre desde hace un año, pero ahora la situación se ha encendido demasiado”.
“Yo llamo siempre a resolver los problemas por la vía de la humanidad. Es el futuro de la humanidad… Hoy una guerra extendida destruiría sino la mitad, una buena parte de la humanidad y de la cultura. Sería terrible. Hoy la humanidad no es capaz de soportarla. Miremos los países que están en guerra en Oriente Medio, también en África, en Yemen”, añadió Francisco.
La situación de Venezuela fue otro de los puntos que se trató en el avión de vuelta de Egipto. Tras la fallida mediación del Vaticano ante los incumplimientos de Maduro. El Santo Padre indicó que “hubo una intervención de la Santa Sede bajo pedido fuerte de los cuatro presidentes que estaban trabajando como facilitadores y la cosa no resultó, y quedó ahí. No resultó porque las propuestas no eran aceptadas o se diluían, era un sí sí, no no. Todos conocemos la difícil situación de Venezuela, un país al que yo quiero mucho”.
Además, avanzó que “sé que ahora están insistiendo (para que el Vaticano participe en las conversaciones, ndr), no sé bien de donde, creo que de los cuatro presidentes, para relanzar esta facilitación, y están buscando un lugar”.
“Yo creo que tiene que ser con condiciones ya, con condiciones claras ya. Parte de la oposición no quiere, está dividida, y los conflictos se agudizan. Pero hay algo en movimiento, estoy informado. Está en el aire todavía. Pero todo lo que se puede hacer por Venezuela hay que hacerlo, pero con las garantías. Si no, jugamos al Pimpim Pirulero, y no va”, indicó.
Sobre los populismos en Europa y la posible salida de varios países de la UE si ganan estos partidos, Francisco dijo que “sobre Europa y sobre la UE, cada país es libre de tomar las decisiones que crea convenientes sobre eso; yo no puedo juzgar si toman ladecisión por un motivo u otro porque no conozco la política interna”.
Añadió: “Hay un problema que preocupa a Europa y que quizá alimenta el problema… la emigración, pero no olvidemos que Europa está hecha con emigrantes. Siglos y siglos de emigrantes. Es un problema que debe estudiarse bien, escuchando las opiniones, respetándolas. Pero las opiniones honestas, con una discusión Política con la P mayúscula. Con la grande política, no con la pequeña política del país, que al final termina pasando”.