La agencia Aciprensa ha detallado el contexto en el que se ha producido este sábado por la mañana una escena a la vez trascendente (en lo espiritual) e informal (en lo logístico): el Papa Francisco se sentó a confesar adolescentes bajo el sol en plena Plaza de San Pedro.

Lo hizo con motivo del Jubileo de los Adolescentes en el Año de la Miseriocordia, una convocatoria que ha llevado a más de 60.000 adolescentes, sobre todo italianos, a Roma. En esta jornada peregrinan a la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro, desde el Castillo de San Angelo, atravesando la Via della Conciliazione para llegar a la Plaza de San Pedro.

"Allí, la famosa y monumental columnata se transformó en un improvisado confesionario en el que los adolescentes podrán acudir al sacramento de la penitencia gracias a 150 sacerdotes que se alternarán a lo largo del día y de la tarde. Francisco apareció en la Plaza de San Pedro ante la sorpresa de los miles de adolescentes y turistas que en ese momento se encontraban allí", escribe Álvaro de Juana en Aciprensa acerca de los hechos.



El Papa se sentó en una de las sillas dispuestas para que los sacerdotes confesaran y administró el Sacramento de la Reconciliación a 16 adolescentes entre las 11:30 y las 12:45 hora local. Estuvo acompañado de cerca por el Presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización, Rino Fisichella, además de por importantes medidas de seguridad.

Los miles de adolescentes no dudaron en inmortalizar el momento con sus smartphones, tablets y cámaras de fotos. 



La jornada continua por la tarde en el Estadio Olímpico de Roma, con una gran fiesta con música y testimonios. Algunos grupos provenientes de distintas diócesis contarán su experiencia y compromiso en la pastoral juvenil. El domingo los jóvenes peregrinos participarán en la Misa con el Papa en San Pedro.