La Santa Sede confirmó este sábado que Francisco visitará la ciudad francesa de Marsella los días 22 y 23 de septiembre, con ocasión de los Encuentros Mediterráneos, que reunirán a 120 jóvenes de países mediterráneos, de culturas y religiones diversas, con obispos católicos de 29 países. Desde la propia organización se enmarca esta reunión "en el diálogo ecuménico e interreligioso" y la "atención a los migrantes" que forman parte de las inquietudes especiales del pontífice.
El propio Papa había afirmado su voluntad de asistir a este evento durante el vuelo de regreso de su viaje apostólico a la República Democrática del Congo y a Sudán del Sur. Estos encuentros son una iniciativa de la conferencia episcopal italiana, con ediciones en Bari en 2020 y Florencia en 2022.
El cardenal Jean-Marc Aveline, arzobispo de Marsella, expresó su gratitud al Papa por acudir a esta tercera edición "para fortalecer nuestra fe, sostener nuestra esperanza y alentarnos en el camino del diálogo y la paz, en la misericordia y la caridad”.
En la boda de Catalina de Médici
Se da la circunstancia de que es la primera vez en quinientos años que un Papa visita Marsella. El último en hacerlo fue un Médici, Clemente VII, en 1533, con ocasión de la boda de su sobrina, Catalina de Médici, con el futuro rey Enrique II de Francia.
Clemente VII casando a Enrique II y Catalina de Médici, en un fresco de Giorgio Vasari en el Palazzo Vecchio de Florencia.
Juan Pablo II visitó Francia en siete ocasiones, tanto lugares de especial significación espiritual, como Lourdes, Lisieux o Paray-le-Monial, como grandes ciudades (París o Lyon). Benedicto XVI solo estuvo una vez, en Lourdes, y Francisco también en una única ocasión, en Estrasburgo, para intervenir ante el Parlamento y el Consejo europeos.
Marsella es la segunda ciudad francesa por población, por detrás de París y por delante de Lyon, Toulouse o Niza.
Según el programa facilitado por el Vaticano, Emmanuel Macron recibirá a Francisco en el aeropuerto de la ciudad el viernes 22 de septiembre, y esa tarde asistirá a una oración mariana con el clero diocesano en la basílica de Notre-Dame de la Garde, seguida por un momento de reflexión con líderes religiosos cerca del Memorial dedicado a los marineros y migrantes perdidos en el mar.
Al día siguiente, el Papa mantendrá un encuentro privado con personas en dificultades económicas en la residencia del arzobispo, dirigirá la sesión final de los Encuentros Mediterráneos en el Palais du Pharo, y por la tarde, antes de regresar, oficiará una misa en el estadio Velódromo.