¡Feliz año nuevo!

Cada año que termina es una oportunidad para mirar atrás, no sólo para recordar lo que hemos perdido o lo que nos ha hecho sufrir, también para agradecer todo lo bueno que nos ha traído, sobre todo las personas que han estado a nuestro lado cuando más lo necesitábamos. El amor es la luz que da sentido a nuestra vida. 

Hoy me uno a tu acción de gracias por el año culminado y te invito a unirte a la mía.

Aunque nuestra vida sea frágil, vulnerable y precaria, como nos está recordando este tiempo, siempre es valiosa porque contamos con quienes nos aman y con el Señor, que está con nosotros, abrazándonos y estrechándonos con su amor redentor. 

En este año que termina quiero dar gracias a Dios especialmente por los hogares Lázaro, esta hermosa familia de amigos que tengo el honor de acompañar. Este año hemos podido consolidar nuestro proyecto y estar en Roma con el Papa, el pasado 28 de agosto, para ser abrazados por él y recibir su aliento: una bella familia de amigos, en palabras del Papa, "hombres y mujeres, que porque les abrieron la puerta una vez [...], sienten la necesidad de abrírsela a otros". 

Nos agradeció nuestro testimonio y nos animó a "seguir adelante". 

En los pisos de Hogares Lázaro habitan entre seis y diez convivientes, jóvenes estudiantes o empleados junto con personas sin techo, en la convicción de que éstos no solo necesitan ayuda materia, sino también el calor de la amistad. En la imagen, la peregrinación a Roma este agosto de los Hogares Lázaro, nacidos en París en 2006 y expandidos luego, entre otros lugares, en España y México.

Además, gracias a San José, hemos encontrado en este año dedicado a él dos edificios, uno en Madrid y otro en Barcelona, y estamos trabajando para acoger nuevos amigos sin hogar.

Hoy agradezco también a todos los que valoráis nuestro empeño y lo hacéis posible con vuestra oración, amistad y colaboración. 

Te deseo mis mejores deseos para este año que vamos a comenzar y te aseguro mi oración.

El Papa, en su mensaje para la Jornada Mundial de la Paz de este primer día del año, nos indica como uno de los caminos para construir la paz la "promoción de la cultura del cuidado", una cultura que "frente a las fracturas de la sociedad y a la inercia de las instituciones, puede convertirse en el lenguaje común que rompa las barreras y construya puentes". 

Los hogares Lázaro son una expresión de esta cultura de la acogida y del cuidado, este modo de hablar sin palabras que está rompiendo barreras en Europa y desde este año también en México. 

Nos unimos a toda la Iglesia en este año nuevo que saludamos dirigiendo nuestra mirada a nuestra Madre, bajo cuyo signo y protección la Iglesia pone el año que comenzamos. 

Madre, aquí tienes a tus hijos.

Reina de la Paz, ayúdanos a construirla en nuestros corazones, familias, y en nuestra sociedad.

Madre compasiva y Consuelo de los afligidos, haznos instrumentos de consuelo y compasión para con nuestros hermanos los hombres.

¡Feliz año 2022!

Para conocernos mejor o para cualquier otra colaboración, visita nuestro portal, escríbenos a colabora@fundacionlazaro.es o llama al teléfono +34623033766. Muchos de vosotros me habéis preguntado cómo podéis ayudarnos a continuar. Aquí te explicamos cómo hacerlo. Os envío también un artículo sobre nuestros hogares publicado este pasado mes de diciembre por la Revista Misión, la publicación más leída de las familias españolas.

El sacerdote Álvaro Cárdenas es el presidente de la Fundación Lázaro España.