Ante la pregunta acerca de si se puede ser judío y cristiano a la vez, o judía y católica a la vez, me llama la atención que tanto desde el judaísmo como del cristianismo la respuesta más inmediata sea "no". Sin embargo, cuando indagamos un poquito en la historia de la salvación, las perspectivas suelen cambiar.
Muy brevemente veamos qué ocurrió desde el principio, utilizando la lógica de Roy Schoeman.
Luego de la caída de Adán y Eva ya estaba anunciada la salvación para todo el mundo. Dios tenía pensado que la redención de toda la humanidad iba a realizarse mediante su propia encarnación y que ésta iba a gestarse y llevarse a cabo en un determinado pueblo.
Para eso, este pueblo debía ser preparado, y es por y para esa misión que fue elegido el pueblo judío. Elegido por Dios para prepararlo para la venida del Mesías.
Es por eso que durante dos mil años Dios los mantuvo separados del resto de los demás pueblos mediante sus leyes y restricciones. Asimismo, fueron los destinatarios de la gran revelación divina, para poder comprender acerca de todo lo ocurrido: la creación del ser humano, su caída, la necesidad de redención, y de la futura venida de un salvador.
Para todo esto, el pueblo elegido debía recibir profecías acerca de este redentor, para poder identificarlo en el momento de su venida. Y también recibir entendimiento teológico para poder comprender todo esto y luego poder transmitirlo al resto de la humanidad.
Y eso fue lo que ocurrió con la llegada de Jesús: algunos judíos como los apóstoles, San Pablo y cientos de otros judíos lo reconocieron como tal y cumplieron la misión de darlo a conocer al resto del mundo. Mientras que hubo otros judíos que no lo reconocieron y siguen hasta hoy esperando la llegada del mesías.
La Iglesia católica, en palabras de Roy Schoeman, es el judaísmo post mesiánico, o se podría decir que el judaísmo es el catolicismo pre mesiánico. No son dos religiones, sino una sola dividida en dos fases:
La primera fase fue para la preparación para la encarnación del Mesías, del redentor de la humanidad. El corazón del judaísmo era la preparación para este evento, con la intención de que cuando esto ocurriera, esa relación especial establecida entre el pueblo judío y Dios se pudiera expandir a toda la humanidad por medio de la fe en Jesús y los sacramentos de la Iglesia, que constituye lo que sería la segunda fase de la religión, y no una diferente.
Por eso ante la pregunta de si se puede ser judío y cristiano o católico a la vez, mi respuesta es definitivamente "sí". ¿Cómo podría un judío dejar de serlo por creer en el mesías judío?
Lo que sí cabe aclarar es que el judío cristiano, o judío y católico, mantiene su identidad judía pero no practica “la ley ” judía en cuanto “acto salvífico”, ya que comprende que la salvación viene de Jesús.
El judío que cree en Jesús jamás pierde su identidad judía. Asimismo, con respecto la parte religiosa, si bien ya no la pone en práctica, la lleva en lo más profundo de su ser, ya no como práctica cotidiana, sino como la semilla que dio el fruto más valioso que jamás existió, y como algo que lo une aun más íntimamente con Él, con Jesús, quien también vivió su vida en el judaísmo.
Yo soy un ejemplo vivo de eso. Soy judía, nacida de madre y padre judíos, criada y educada como judía. Y además creo que Jesús es el mesías judío esperado por tantos años y anunciado por la Tora y por los profetas. Amo mi judaísmo ahora aún más que antes de creer en Jesús, ya que ahora comprendo que todo lo que aprendí durante toda mi vida acerca del judaísmo, las promesas de Dios y las profecías fueron cumplidas y todas las enseñanzas del judaísmo fueron llevadas a su plenitud.
Por eso hoy afirmo no sólo que creer en Jesús y en la Iglesia como judía no es una conversión sino que es una completud. Mi judaísmo fue completado y a la vez llevado a su plenitud.
Publicado en el blog de la autora, Judía y Católica.