Mi gratitud a Álex del Rosal, director que me ofrece esta ventana. Me asomo a ella por cariño y admiración hacia LOLO, el Beato Manuel Lozano Garrido. Y mi saludo y amistad a aquellos que desde hoy deseen contactar.
Hoy, 3 de noviembre 2011, se cumplen 40 años de la muerte de Lolo en Linares. Y hoy, por segunda vez (2010 y 2011) celebra la Iglesia de Jaén que Lolo tuvo una vida heroica, llena de virtudes también heroicas; y por eso fue declarado BEATO por Benedicto XVI. La celebración fue en Linares el 12 junio 2010.
No creo que haya que narrar su biografía; baste este apunte: nació en Linares (1920); fue joven de la Acción Católica y militante en ella. A los 22 años se “ata” a una silla de ruedas durante 28 años, con parálisis total. Al final, 9 años, también ciego. Hombre de honda piedad eucarística y tierna devoción mariana. www.amigosdelolo.com
En esta misma ventana, Guillamón lo retrataba “Lolo era uno de los nuestros”. Y yo pienso considerar ese ‘nuestros’ como un “posesivo” de todos los vinculados a Religión en libertad.
Hoy, por 1ª vez en la Historia de la Iglesia -a mi parecer, en una Iglesia particular (la Diócesis de Jaén), y creo que no se haya dado el caso antes en todo la Iglesia Universal-, los que recen el Breviario (la oración oficial de la Iglesia) se encontrarán con un “trozo de periódico” como texto oficial de oración: una página de la prensa del día 9 de abril 1964, en que Lolo publicaba un escrito suyo (“Oración ante una mano agujereada”, en ‘Prensa asociada’ y reproducido en varios medios de comunicación entonces).
Porque en aquellos 28 años de parálisis, y sobre todo en los 9 finales de ceguera, Lolo fue y se sintió “periodista y escritor”. Un día llegó una carta a su casa con esta dirección: “Lolo, periodista por la gracia de Dios. Linares”, y nada más. Esa cualidad de su vida, su tarea diaria de escribir, es la razón o causa de este escrito mío.
Ando ahora trabajando en revisar sus artículos de prensa: 308 he contabilizado y tratado informáticamente. Precisamente ha sido una tarea de meses, con mucha ayuda de amigos de Lolo, que realizo desde que Álex del Rosal me ofreció esta posibilidad: presentar el pensamiento del Beato Manuel Lozano Garrido, LOLO, sobre todo (o mejor, “en exclusiva”) desde sus artículos de prensa. Pues además son 9 los libros que él publicó; y muchas de esas páginas llevan como semilla aquellos renglones mañaneros de los periódicos.
No sé aún con qué periodicidad ni siguiendo qué orden intentaré la selección de sus escritos y su difusión por este medio de Religión en Libertad. Durante años, desde 1993, me dediqué a la tarea de la Postulación de su causa de Canonización y Beatificación. Precisamente como fruto de ese trabajo de años puedo destacar algún aspecto:
a) de su vida -con palabras de Lucy, su hermana, su ángel, su enfermera: Él supo hacer de lo extraordinario (de su dolor, de sus limitaciones tan grandes…) algo ordinario. ¡Perfecto retrato de Lolo! ¡Qué maravilla hacer “como si fuera ordinario, normal”, aquel trabajo y vivir suyo! ¡Escribir sin manos, leer sin ojos, y sin pies volar por el mundo! Leer una crónica suya es acabar ‘anotando’ cómo observa cada detalle, y cómo se mueve este ‘inquieto’ periodista. Lolo supera su discapacidad; como si no la tuviera: lo decía ayer Religión en Libertad hablando de CECO y los discapacitados que quieren hacer de Lolo su patrón.
b) Periodista cristiano, por lo que escribe y por cómo lo escribe. Baste esta frase suya: El periodista es catedrático en la Universidad de la vida. Así lo escribe él en unos apuntes para un cursillo de periodismo ¡en 1956! Miro y remiro esos folios ya amarillentos. No puedo menos que alegrarme al ver hoy también en Religión en Libertad: Pedro José Rodríguez Rabadán, de Telemadrid, gana el 3º premio “LOLO”, de periodismo, que concede UCIP-E. ¡Felicidades a él y felicidades a UCIP-E!.
Y, ¡gracias, Lolo! Porque se ve tu “estrella” iluminando y guiando. Periodista cristiano por lo que dices, lo que escribes, lo que narras; y también por el enfoque y los criterios que aplicas hablando de las minas y la silicosis, las escuelas o el urbanismo, el futbol o la Semana Santa… Y gracias por tu Obra “SINAÍ”, pero de eso, otro día hablamos.
Y c) Lolo con los pies en el suelo. Juan Rubio, biógrafo de Lolo y director de ‘Vida nueva’, en la que Lolo también escribió, tituló una sección de sus escritos: ‘A ras de suelo, a ras de tierra’. Es una frase que toma J. Rubio de los escritos de Lolo. Porque conocer a Lolo (doy gracias a Dios por aquellos siete años de mi vida al lado de este hombre Beato y dichoso) era palpar como su “figurilla”, de apenas 30 Kg. de amasijo de huesos y que nunca ponía los pies en el suelo porque los reposaba en la tabla del sillón de ruedas, era de calor humano, de cercanía sencilla: Lo que pasa, Lolo, es que tienes un corazón tan grande que no te cabe en el pecho, le decía Juan Pérez, su médico y amigo. Su altura mística le embebía: “Mesa redonda con Dios”; “Las estrellas se ven de noche”; “Reportajes desde la cumbre”, son algunos títulos de sus libros. Pero esa altura suya era tan real, tan limpia que por eso sabía penetrar y acercarse -con los pies en el suelo- a ‘cada quien’ con todo afecto y amistad entrañable.
Pero no deben contar los comentarios míos. Quiero más bien que mi tarea sea acercar sus escritos de prensa, su buen hacer “con la pluma” rápida de los periódicos, para que el mundo sea ‘más bueno’. Como su vida fue de periodista con vocación desde siempre, hoy no cabe otra cosa que abrir esta sección con el Decálogo del periodista, que él escribió.
¡Ah! Y felicidades Lolo por el 40º cumpleaños de tu “diez natalis” y por los dos años (2010 y 2011) de tu BEATITUD.
Rafael Higueras Álamo
Postulador de la Causa de canonización de “LOLO”